Colarse en territorio Explorer

Existen programas que generan un cambio de identificación en los navegadores para poder visitar aquellos sitios que se programan exclusivamente para Internet Explorer
Por Benyi Arregocés Carrere 10 de septiembre de 2007

Mozilla Firefox y Opera cuentan con la habilidad, uno mediante complementos y el otro por defecto, de cambiar el nombre con que cada navegador se identifica ante los servidores web, de forma que el servidor crea que el usuario maneja Internet Explorer (IE). Este camuflaje evita que el usuario deba cambiar al IE, algo que no es sencillo si se utiliza GNU/Linux, sistema operativo para el que Microsoft no ha creado ninguna versión de su navegador.

En muchos casos los programadores sólo comprueban que el sitio web funciona en IE y se olvidan de otros navegadores

Internet Explorer de Microsoft es el navegador preferido por los usuarios para visitar los sitios web, en parte porque viene incluido de serie en los sistemas operativos de Microsoft. A causa del dominio de IE en este campo, bastantes programadores se han centrado en dicho programa para optimizar el código HTMLde las páginas. Es decir, el código por el que el navegador se guía para mostrar las páginas con su diseño, sus tipos de letra y sus imágenes.

En muchos casos, afortunadamente cada vez menos, los programadores sólo comprueban que el sitio web funciona en IE y se olvidan de otros navegadores, menos utilizados pero que se caracterizan por innovar y ofrecer bastantes más posibilidades, además de ser gratuitos, como sucede en el caso de Mozilla Firefox u Opera.

Poco respeto por los estándares

Esto no constituiría un gran problema si todos los navegadores trabajaran de la misma manera, pero cada uno interpreta el lenguaje HTML de forma diferente. El principal inconveniente radica en que Internet Explorer no respeta los estándares de diseño web que marca el Consorcio World Wide Web, organismo que se dedica a marcar los patrones que debe seguir la Red para conseguir una Internet accesible para todo el mundo y adaptable a todos los dispositivos (ordenadores, teléfonos móviles, etc.).

El principal inconveniente radica en que Internet Explorer no respeta los estándares de diseño web que se marcan para conseguir una Internet accesible para todo el mundo

Por ello, si se diseña un sitio web adaptado exclusivamente a las peculiaridades de Internet Explorer se corre el riesgo de que funcione mal en los demás navegadores (Firefox, Opera, Safari, etc.). En ocasiones, este mal funcionamiento provoca que el usuario de los demás navegadores no pueda interactuar en absoluto con el sitio web. De esta manera, en caso de querer reservar un viaje en avión, realizar trámites con la administración o comprar en algún comercio electrónico, el usuario no podrá efectuar estas tareas.

Incluso, se puede dar el caso de que el sitio muestre una página especial que solicite al usuario emplear IE para poder navegar. Esto sucede porque cada vez que se navega por Internet, el navegador enseña a los servidores datos como el sistema operativo o el navegador utilizado.

Una identificación de un navegador Firefox que esté instalado en Windows sería por ejemplo así: «Mozilla/5.0 (Windows; U; Windows NT 5.1; es-ES; rv:1.8.1.6) Gecko/20070725 Firefox/2.0.0.6.». Por esta razón, los servidores pueden detectar cuándo no se usa IE y enseñar una página que exija el cambio al navegador de Microsoft.

El camuflaje, la solución más sencilla

Ante esta situación, afortunadamente cada vez menos frecuente, en que los diseñadores se olvidan de los estándares y de los usuarios que no emplean el IE, la única solución consistía en cerrar el navegador y volver a intentarlo con IE.

Pero, además de las molestias que esto suponía, los usuarios del sistema operativo GNU/Linux se encontraban con más impedimentos, porque sólo podían acceder si instalaban Winee IEs 4 Linux, que permiten ejecutar el programa de Microsoft en este sistema operativo de código libre.

En estos momentos se puede resolver el problema sin cambiar de navegador; el truco consiste en modificar el nombre con que éste se identifica ante los servidores

Sin embargo, en estos momentos se puede resolver el problema de una forma más sencilla y sin cambiar de navegador. El truco consiste en modificar el nombre con que el navegador se identifica ante los servidores que después muestran los sitios web y, de esta manera, engañarlos para que envíen la página, aunque realmente no se trate de un navegador IE, con lo que los inconvenientes para interactuar con el sitio desaparecen.

En Firefox, se puede instalar una extensión que automatiza la tarea de cambiar esta línea de identificación, User Agent Switcher, que permite a los navegadores Firefox, Flocky Seamonkey (el sucesor de la antigua Mozilla Suite) adoptar el nombre de cualquier otro navegador: Internet Explorer, Opera, Netscape o, incluso, crear uno completamente inventado o que tenga en cuenta las últimas versiones publicadas por los creadores de los distintos navegadores.

Integrado en Opera

De igual manera,Opera, un navegador con menor cuota de usuarios que IE y Firefox pero muy apreciado por las personas con discapacidades por su accesibilidad, incluye esta opción dentro de la configuración por defecto de su navegador, y lo hace con más opciones que el citado complemento de Firefox.

Así, los usuarios de Opera pueden definir para cada sitio web el nombre del navegador con que se identificarán: IE, Firefox o el propio Opera. Además, el usuario elige entre dos niveles de camuflaje: ‘Identificar’, que lo convierte en otro pero manteniendo una referencia a Opera, y ‘Simular’, por la que se omite cualquier referencia a Opera.

Los usuarios de Opera pueden definir para cada sitio web el nombre del navegador con que se identificarán: IE, Firefox o el propio Opera

IE Tab es un complemento que presenta otra solución para este problema en caso de que se utilice Firefox, ya que integra IE en una nueva pestaña de Firefox cuando el usuario lo requiere, sin necesidad de abrirlo por separado.

En esta línea se encuadran otras dos soluciones: IE View (sólo para Windows) e IE View Lite, que se diferencian de IE Tab porque abren las ventanas que requieren de IE directamente en el navegador de Microsoft, si se pulsa la opción después de pinchar el botón derecho del ratón. Así mismo, mediante estos complementos el usuario puede definir los sitios que siempre se abrirán en IE, con lo que se gana en rapidez.

Efecto distorsionador en las estadísticas de visitas

El camuflaje de los navegadores Firefox y Opera, que son capaces de transmutarse en IE puede llevar a los webmaster a conclusiones erróneas. Por ejemplo, el que diseñó su sitio únicamente con IE en mente observará que su audiencia utiliza mayoritariamente IE, porque una vez que se produce el cambio de identificación, el servidor no tiene forma de reconocer cuáles son verdaderos IE y cuáles se encuentran camuflados.

Es decir, las estadísticas estarán, en parte, manipuladas y los webmaster no se percatarán de que una parte de sus usuarios utiliza otro navegador con el que que no se puede navegar bien en la página.

La excepción a este caso la constituye la opción que presenta Opera de ‘Identificar’, mediante la cual el navegador se camufla pero mantiene una referencia al propio programa, lo que permite contabilizarlo estadísticamente.

Sigue a Consumer en Instagram, X, Threads, Facebook, Linkedin o Youtube