El «tercer paquete» de la liberalización del transporte ferroviario quedó ayer aprobado por el Parlamento Europeo, que apoyó que la obligatoriedad de indemnizar a los pasajeros cuyos trenes se retrasen quede recogida en el capítulo de derechos y obligaciones de transportistas y pasajeros.
Según el texto aprobado, los retrasos de una hora se indemnizarían con un 25% del precio del billete y los superiores a dos horas con la devolución de la mitad del importe. No obstante, estas indemnizaciones no afectarían a los trenes de los servicios de cercanías.
La Eurocámara aprobó que la liberalización del transporte internacional de pasajeros llegue en el año 2010, aunque para los trayectos nacionales habrá que esperar al año 2017. Además, para que estas medidas liberalizadoras puedan ser puestas en práctica, deben ser aprobadas por los Estados miembros de la Unión Europea.
