¿Sabía que en España cada vez hay más viajeros que van en furgoneta? Ya sea por la costa, por zonas de montaña o por otros países de Europa, la furgoneta permite deleitarse con paisajes increíbles y maravillosas playas con plena libertad. Este artículo recoge, gracias a los consejos de varios expertos, seis viajes refrescantes para hacer en furgoneta: desde Cabo de Gata, Picos de Europa y las Landas francesas hasta Portugal, Dinamarca o Noruega. ¡Y trucos para disfrutarlos!
¿Pasar las vacaciones en una furgoneta? ¿Por qué no? En nuestro país cada vez hay más adeptos a viajar en camper, pues es una manera muy barata de recorrer y conocer distintos lugares. De hecho, en opinión de Matthias Straub, editor jefe de MYVAN, España es «el país que lidera esta tendencia de entusiastas con las furgonetas». Y no es de extrañar este auge, pues viajar de este modo, en palabras de Loli Flores, autora del blog Viajando en furgo y experta viajera, proporciona la «libertad de decidir en cada momento dónde ir, qué ver, dónde comer o dormir, lo que siempre es una ventaja».
1. Cabo de Gata: camping exclusivo para furgonetas
Senderismo, rutas a caballo, un baño en playas vírgenes de agua cristalina… Cabo de Gata (Almería) es un paraíso. Pero, además, fomenta el turismo de furgonetas y cuenta con un camping solo para campers. Está situado en un enclave privilegiado, rodeado de hermosas playas: Agua Amarga, San José, Las Negras… ¡Un destino inmejorable!
2. Galicia: Fisterra y la ría de Arousa
En el otro extremo de la península, en Galicia, hacer un viaje en furgoneta resultará inolvidable. Es imprescindible incluir una visita al cabo de Fisterra (Finisterre), el punto considerado como el fin del mundo en la época del Imperio romano. Muy cerca del Faro de Fisterra se encuentra el parking de El Faro donde se puede estacionar y pernoctar un máximo de 48 horas.
Además, se puede disfrutar de las playas y los paisajes espectaculares de Arousa y practicar multitud de deportes acuáticos. Hay un área, Árosa Surfcamp, que tiene todos los servicios y acceso directo a la playa.
3. Senderismo en Sotres, el pueblo más alto de Asturias
Además de la playa, la montaña es otro sitio idóneo para pasar un verano fresco y, como reconoce Loli Flores, es donde «en España, en cuanto se sube un poco, ya hace fresco y se puede pasar una noche sin calor». Uno de los mejores lugares para perderse en el periodo estival con la camper es Sotres, en los Picos de Europa. Es un precioso pueblo rodeado de montañas y con numerosas rutas para hacer senderismo. Para pernoctar se puede utilizar el parking, situado al final de pueblo.
4. Las Landas francesas, ¡fresquito entre las olas!
Fuera de España, Hossegor, Vieux Boucau o Capbreton, en la región de las Landas (suroeste francés), son el destino perfecto para los amantes del surf y las bicis. Sus playas interminables, con enormes dunas y olas magníficas, permiten pasar unos días de relax sin dejar de lado el deporte. Todas estas poblaciones tienen áreas de aparcamiento de furgonetas y campings casi a pie de playa ¡y a muy buenos precios! (de media, 15 euros el día).
5. Países nórdicos: el paraíso de la furgoneta
Dinamarca, Noruega o Suecia son la opción que recomienda Matthias Straub para disfrutar del verano en furgoneta. A un clima fresco, los países del norte de Europa unen «increíbles paisajes, que van más allá de los imprescindibles fiordos». Además, tienen una gran tradición y preparación para este tipo de turismo, con «muchos aparcamientos gratuitos para furgonetas». Hasta hay campings donde se pueden utilizar las duchas o lavadoras pagando solo por su uso, sin tener que hacer noche.
Para viajar tranquilos en estos países conviene tener en cuenta que son muy estrictos respecto a los límites de velocidad, pues por sobrepasar el límite, aunque sea en 10 km/h, pueden caer multas superiores a 200 euros.
6. Costa norte portuguesa: Nazaré y Oporto
Visitar un pueblo típico de pescadores y pasar unos días en una gran ciudad es lo que se puede hacer, si se viaja en furgoneta a Nazaré y Oporto, a orillas del Atlántico. Pernoctar en Nazaré obliga a subir a la parte alta del pueblo, pues no es fácil encontrar aparcamiento, y en Oporto, cruzar hasta la orilla donde están sus famosas bodegas. Pero en ambos casos merece la pena, pues se tendrá el premio de la playa, en un caso, y de disfrutar de una preciosa urbe, en el otro.
- Qué llevar: como una furgoneta tiene un espacio reducido, hay que llevar lo justo, y siempre lo más adecuado al clima y las condiciones del lugar al que se viaja.
- : al viajar, estacionar o dormir no todo vale. En teoría, si se está estacionado, es decir, no se tiene ningún elemento que invada el espacio lateral (toldo, sillas y mesas, que se considera acampada) se puede dormir en cualquier lugar. Pero no siempre es tan fácil, ya que hay localidades que no permiten estacionar en cualquier sitio.
La hora de las comidas
: según el destino, habrá que llevar o no comida. Siempre es conveniente cargar con agua y latas. Pero, además, si se viaja a lugares donde la fruta y verdura son muy caras (como los países nórdicos), también sería de gran utilidad no olvidarse de estos productos.
