Los vuelos de larga distancia permiten a los pasajeros alcanzar otro continente en poco tiempo. Pero algunos trayectos son de gran duración: se puede tomar el desayuno en el punto de origen y llegar pasada la cena al lejano destino. Si la ruta es de norte a sur, el viajero pasa de una estación del año a otra en un solo día.
Para disfrutar de forma agradable de los vuelos de medio o largo recorrido es fundamental ir vestido con ropa holgada (nada de cinturas que aprieten ni otro tipo de apreturas que puedan llegar a causar cierta desazón). Es recomendable llevar una chaqueta fácil de poner y quitar por si se siente frió o calor y, por supuesto, calzado cómodo e incluso de repuesto. Merece la pena pararse un momento a elegir meditadamente todo aquello que está permitido transportar en el equipaje de mano y que nos puede hacer falta.
En la bolsa de mano que viajará con nosotros en el avión podemos llevar, entre otras cosas, la documentación, el dinero, ropa de muda y un neceser con un peine, un cepillo de dientes y otros útiles de aseo.
Las personas que permanecen sentadas durante más de cuatro horas tienen riesgo de padecer la denominada trombosis venosa profunda (TVP), que es una coagulación de la sangre que suele producirse en la parte inferior de las piernas. Hay personas más propensas que otras (por ejemplo aquellas que han sufrido cirugía reciente, inmovilización o traumatismos) pero para prevenirla, en general, es aconsejable:
– Beber líquidos, pero que no contengan alcohol ni cafeína.
– Evitar cruzar las piernas.
– Caminar de vez en cuando por la cabina.
– Al ponerse de pie aprovechar para hacer estiramientos de piernas y brazos.
– Realizar movimientos circulatorios y de pedal con los pies y ejercitar, en la medida de lo posible, las piernas.
– Si tiene algún factor de riesgo adicional, consulte a su médico antes de viajar y pregúntele si le convendría llevar medias de compresión y si necesita tomar medicación.
Además de para prevenir la TVP o síndrome de la clase turista, es recomendable seguir tanto los consejos anteriores como los que siguen a continuación para hacer mejor el vuelo:
– Acomodarse en el asiento correctamente, de manera recta.
– Estirarse y relajarse periódicamente, inspirando profunda y lentamente por la nariz y expirando por la boca.
– Al ponerse de pie, balancear el peso corporal, elevar los talones y apoyarse en la punta de los pies y viceversa.
– Girar suavemente el cuello hacia un lado y hacia el otro.
– Mover los hombros adelante y atrás
