Elena Santiago (Cuenca, 1974) lleva tres años trabajando desde la Asociación Española de Fabricantes de Ladrillos y Tejas de Arcilla Cocida (HISPALYT) en hallar la fórmula que ofrezca el mejor resultado a menor precio. Esto es, la utilización de elementos de construcción de primera calidad, resistentes al ruido y al frío, sin que esto suponga un mayor desembolso para el cliente. Es muy consciente de que lograr una mayor comodidad y seguridad en la vivienda no siempre está reñido con el respeto al medio ambiente. La experta incide en que además de las características de los materiales debemos fijarnos en otras prestaciones mucho más importantes en la compra de una vivienda, como el aislamiento acústico y térmico, los métodos de ahorro energético, los sistemas de gestión del agua, la seguridad estructural y la protección contra incendios. En todo ello trabaja la industria cerámica estructural en España, que se basa en proyectos de alta calidad, siempre respetuosos con el entorno. “La vivienda en España ha mejorado en los últimos años aunque todavía hay margen para optimizarla”, explica.
Hay muchos elementos que tienen una influencia directa en la calidad final de la vivienda. En primer lugar, es muy importante revisar detalladamente la memoria de calidades y, en caso de duda, consultar con profesionales independientes que nos aseguren que los materiales que constan en la memoria ofrecen buenos resultados. Además de las características de los materiales, debemos fijarnos en otras prestaciones mucho más importantes como el aislamiento acústico y térmico, los métodos de ahorro energético, los sistemas de gestión del agua, la seguridad estructural y la protección contra incendios. Todos estos aspectos no dependen tanto de la calidad de los materiales como del correcto diseño y de su colocación en obra. En cualquier caso, los compradores no debemos tener miedo en hacer todas las preguntas que consideremos necesarias para resolver todas las dudas. La compra de una vivienda suele ser la más importante de nuestra vida y, por tanto, conviene revisar y tener completa seguridad sobre la calidad del producto que estamos adquiriendo. Muchas veces, visitamos quince tiendas para comprarnos un par de zapatos y, en cambio, somos menos exigentes a la hora de comprar una casa.
“Muchas veces visitamos quince tiendas para comprarnos un par de zapatos y, en cambio, somos menos exigentes a la hora de comprar una casa”
Se ha mejorado en los últimos años pero sigue habiendo margen para optimizarla. La entrada en vigor del Código Técnico de la Edificación (CTE) va a permitir generalizar la construcción de calidad, obligando a ella por ley. Hasta ahora, la normativa no era muy exigente y, por tanto, dependía más de la voluntad de los promotores. Excepto casos muy concretos, la vivienda que se ha construido en España en los últimos años es una vivienda de calidad, construida con materiales de calidad. Nuestra apuesta, la de la industria cerámica estructural, es incidir en ello y seguir mejorando año a año mediante la innovación de productos y técnicas constructivas.
El ladrillo cerámico tiene excelentes prestaciones en cuanto al aislamiento acústico, aislamiento térmico, seguridad estructural y protección contra el fuego. Las dos primeras son muy importantes porque, en primer lugar, el aislamiento acústico mejora el estado de confort de nuestra vivienda, y, en segundo lugar, el aislamiento térmico nos permite ahorrar energía y consumir menos calefacción y aire acondicionado, haciendo que nuestra vivienda sea más respetuosa con el medio ambiente. Por otro lado, no podemos olvidar que el ladrillo cerámico, que en España es un material muy usual, en otros países europeos e, incluso, en Estados Unidos se considera un material de gran calidad, destinado a viviendas de alto standing. La cultura cerámica forma parte de la arquitectura española desde hace siglos y nuestro deber es seguir mejorando para que en el futuro sea también así.
SILENSIS es la marca que identifica el sistema de construcción de paredes de ladrillo separadoras entre viviendas que cumplen con las exigencias acústicas del CTE. Esto significa que, gracias a los materiales y a su método de construcción, SILENSIS logra un aislamiento en las paredes separadoras de entre 50 y 55 decibelios ‘in situ’. Este resultado es una garantía de aislamiento y, por tanto, de calidad. Es una apuesta muy importante para la industria y está siendo muy bien acogida por los profesionales de la arquitectura y de la construcción, así como por los clientes que empiezan a conocer el nuevo sistema de construcción de paredes de ladrillo.
Es un sistema de construcción de fachada ventilada y exenta con ladrillo cara vista. Aporta soluciones sencillas, optimizando las cualidades de este tipo de ladrillo, para la resolución de fachadas con una gran calidad e inmejorables prestaciones. Este sistema mejora especialmente el aislamiento térmico de la vivienda, reduciendo las diferencias de temperatura en el interior y haciendo que disminuya, por tanto, nuestro consumo energético, ya que no será tan necesario refrescar o calentar la vivienda. Además, se ejecuta fácilmente, gracias a la aplicación del sistema ‘G.H.A.S’., una nueva técnica de construcción. Es, por tanto, un sistema económico, seguro y muy estético.
La apuesta de la industria cerámica estructural, desde hace años, se ha centrado en ofrecer productos de calidad y respetuosos con el medio ambiente. Si tenemos en cuenta que la exigencia de calidad es cada vez mayor por parte de la normativa, pero también de los ciudadanos, considero que estamos en una línea positiva y que podremos afrontar ese previsible descenso de actividad con las mayores garantías. Nuestros productos están respondiendo a las necesidades concretas de los consumidores y, por tanto, estamos en las mejores condiciones para ser competitivos en un entorno de menor actividad en el que ‘el todo vale’ ya no será posible.
“La arquitectura y la construcción residencial se están adaptando rápidamente a la voluntad ciudadana de respetar el medio ambiente”
Estamos convencidos de ello. La arquitectura y la construcción residencial en general se están adaptando rápidamente a la voluntad ciudadana de respetar el medio ambiente. Para lograrlo deben converger varios factores, uno es el de los materiales que se utilizan, pero después tiene mucha influencia también la política urbanística en la zona, la calidad del proyecto arquitectónico, la voluntad del promotor de ofrecer calidad o la buena ejecución de la obra. Nosotros trabajamos ofreciendo materiales como el bloque Termoarcilla, de características ecológicas, y con prestaciones de inercia térmica y aislamiento acústico -una de las características de la arquitectura sostenible-. Además de los nuevos materiales, la Asociación también innova en técnicas constructivas. SILENSIS y STRUCTURA son buenos ejemplos de arquitectura sostenible realizada con materiales cerámicos.
Me parece que España es un mercado muy grande en el que podemos encontrar diferencias sensibles según qué zona analicemos. Mi impresión es que en las ciudades grandes y medianas la inversión va a seguir siendo rentable porque la demanda de vivienda se está manteniendo gracias a las buenas cifras del empleo y a la llegada de inmigrantes. En destinos de carácter vacacional, de segunda vivienda, se puede experimentar un descenso de actividad algo más acusado porque la inversión extranjera muestra indicios de ralentización y el mercado nacional no puede absorber toda la demanda. En cualquier caso, más que de ralentización me gustaría hablar de normalización del mercado. En los últimos años, la actividad estaba en niveles de récord y a partir de 2008 volveremos a niveles más acordes con las necesidades del mercado.
“En estos momentos, la industria cerámica estructural española es un referente para el conjunto del sector en Europa”
El sector es optimista por algunas de las razones que ya hemos ido desgranando. En primer lugar, porque los productos cerámicos estructurales responden a las necesidades de los consumidores y a las exigencias de la nueva normativa. Son productos de calidad y con características sostenibles. En segundo lugar, porque la industria ha invertido en I+D, lo que ha permitido aumentar la productividad y también la gestión medioambiental. En estos momentos, la industria cerámica estructural española es un referente para el conjunto del sector en Europa.
