Profesionalización de las ONG

Los trabajadores de las ONG cuentan cada vez con una formación más específica y profesionalizada
Por Azucena García 29 de abril de 2011
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Imagen: Gabeira 43

La profesionalización es un rasgo distintivo de las ONG. La figura del voluntario sin formación se difumina en las plantillas y equipos de las organizaciones, que se componen cada vez más de voluntarios y personal formado, a menudo, con experiencia en las áreas donde desempeñan su labor. Es un modo de motivar a las personas y fomentar la calidad de los servicios que se prestan. Las ONG siguen en la actualidad la senda de la mejora continua.

No es ninguna novedad. Hace varios años que las ONG definieron unos perfiles profesionales adaptados a sus necesidades y optaron por contar con profesionales en sus plantillas para mejorar la calidad de sus servicios. Pero además, ahora se apuesta por la formación de los trabajadores y su reciclaje desde la propia organización. También en el caso de los voluntarios, se imparten cursillos, jornadas u otras actividades para que se formen en el desempeño de una labor específica, centrada en el público a quienes se dirigen.

El Anuario del Tercer Sector de la Acción Social (TSAS) en España, elaborado por la Fundación Luis Vives, destaca que «ocho de cada diez entidades dicen haber realizado acciones formativas en los últimos tres años». Estos resultados apuntan a la formación como una herramienta clave para favorecer los cambios en el seno de una ONG, tanto en el plano estratégico como organizativo.

Esther Camuñas, coordinadora de comunicación de la Fundación, reconoce que las ONG apuestan cada vez más por la profesionalización de sus trabajadores «como una forma de motivación de las personas, de desarrollo personal y profesional, de crecimiento de la organización y de impulso o fomento de la calidad de los servicios que ofrecen». Destaca un aumento del número de asociaciones y fundaciones que se adhieren a la mejora continua, «junto con métodos y procesos que eviten la pérdida de talentos». No obstante, el porcentaje de entidades con una partida presupuestaria exclusiva para formación llega al 42% y una proporción de los empleados carece de los conocimientos adecuados. Se estima que el 70% del personal cuenta con la formación adecuada para el desempeño de su trabajo.

Necesidades de formación

La profesionalización apuesta por habilidades directivas, herramientas web 2.0, captación de fondos o RSE

Las ONG que fomentan la formación ayudan al desarrollo y crecimiento de las personas y de ellas mismas, según Camuñas. «El resultado más evidente de una actividad formativa es la mejora de las competencias, habilidades y herramientas para un mejor desempeño profesional», precisa.

En la actualidad se atienden necesidades relacionadas con las nuevas tecnologías y la gestión de los recursos, de manera que los programas formativos más demandados son los relacionados con captación de fondos -después de que el 63% de las entidades haya sufrido modificaciones en su financiación-, habilidades directivas, herramientas web 2.0, innovación social, RSE, ciberactivismo o planificación estratégica. «Uno de los retos de las entidades no lucrativas es la formación, junto con la adaptación de los perfiles formativos a la nueva situación socioeconómica», insiste Camuñas.

Señala que la necesidad de conocimientos técnicos, «necesarios para llevar a cabo la intervención social o la gestión de las organizaciones», ha dado paso al entrenamiento en competencias, habilidades y actitudes deseables en técnicos, directivos y personal voluntario. Pero las nuevas tecnologías no solo marcan las necesidades de las entidades, sino el modo de estudio, ya que en su mayoría se impulsa la formación on line, el e-learning y el denominado «blended learning» o formación mixta, que combina formación presencial y on line, un modo de reducir costes en tiempos de crisis.

Avances en la gestión

Las ONG se relacionan a menudo con personal voluntario y fines solidarios que buscan el desarrollo de las personas y del entorno. Sin embargo, cada vez son más los profesionales remunerados que las conforman. Incluso los voluntarios cuentan con formación o experiencia en ámbitos concretos. Las mejoras y avances en su gestión técnica, innovación, creatividad y calidad de la actuación, describe Esther Camuñas, son una realidad y marcan «una clara tendencia hacia la profesionalización».

Las ONG se han convertido en un sector más que genera empleo, sin dejar de atraer a personas voluntarias

Las ONG se han convertido en un sector más que genera empleo, «sin dejar de atraer a personas voluntarias, que quieren contribuir con su ayuda y granito de arena a través de un trabajo no remunerado o voluntario».

En la actualidad, según datos de la Fundación Luis Vives, el tercer sector de acción social emplea a 530.000 personas (2,7% del mercado laboral), el 24,4% de las fundaciones tiene 50 o más trabajadores y el 75,3% declara haber incrementado el número de empleados en los últimos tres años. «A estos datos de empleo remunerado hay que sumar el de las personas voluntarias que colaboran con las ONG y que se estima en torno a 873.000 en todo el sector», añade la Fundación.

Dónde formarse

La Coordinadora de ONG para el Desarrollo de España (CONGDE) cuenta con un Campus de formación on line, cuyo programa para este curso propone formarse en “Voluntariado de Cooperación y Acción Humanitaria” (del 17 de mayo al 12 de junio) o “Comunicación y ONGD” (del 10 de mayo al 5 de junio). El entorno virtual de enseñanza pretende aprovechar la flexibilidad de éste para que los alumnos estudien “donde y cuando quieran”, un aspecto muy valorado por los trabajadores en activo. No obstante, se pide que se conecten “con la mayor frecuencia posible para participar de forma activa” en el curso.

El portal Canalsolidario.org también recoge un apartado dedicado a cursos, talleres y máster para el personal de ONG, donde se publican las propuestas de diferentes organizaciones.

La Escuela Fundación Luis Vives también es una iniciativa “específica y especializada para ONG”. El Programa Abierto de la entidad cuenta con una oferta formativa básica, basada en cursos cuya duración oscila entre 5 y 50 horas lectivas, dedicadas a áreas temáticas consideradas claves para las organizaciones. Los cursos son presenciales, on line o mixtos, y los más demandados son los contenidos formativos relativos a: formación técnica específica sobre el ámbito de intervención social de la ONG (inserción laboral, atención sociosanitaria o interculturalidad, entre otros), formación en gestión de organizaciones (gestión económica, de proyectos o de equipos) y formación en otro tipo de competencias transversales, como trabajo en equipo, escucha activa o comunicación.

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