Iniciativas solidarias para empezar con el nuevo año y que no dejarás en un mes

Las acciones que nos permiten apoyar a otras personas nos ayudan a la vez a ser más felices, por ello es habitual que las mantengamos
Por Azucena García 30 de diciembre de 2014
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En época de crisis, son muchas las personas que necesitan ayuda. Por ello las ONG buscan aumentar las donaciones, pero también el capital humano. Las personas voluntarias son fundamentales para muchas organizaciones. Pero no solo estas ganan, sino también quienes dedican su tiempo a ayudar a los demás. Está demostrado que nacemos solidarios, nuestro cerebro regula la predisposición a ayudar y, por ello, somos personas empáticas. Damos calidad de premio a la satisfacción que sentimos cuando ayudamos. Este artículo destaca varias iniciativas solidarias que podemos apoyar desde ahora, con el comienzo del nuevo año, y cuyos beneficios -individuales y colectivos- son tales, que nos animarán a no dejarlas en un mes.

Propuestas solidarias que enganchan

Tomar parte en iniciativas solidarias, como ocurre con otras actividades, requiere de cierta predisposición. Hay que tener ganas de llevar a cabo acciones altruistas para implicarse de una manera efectiva y que estas tengan continuidad. No obstante, las propuestas planteadas a continuación son atractivas por sí solas. Pensadas tanto para quienes tienen tiempo como para quienes carecen de él o prefieren comprometerse con donaciones, planteadas para quienes nunca hicieron voluntariado y han decidido que de este año no pasa y hasta para quienes eligen hacer de la cooperación su modo de vida, las siguientes son propuestas para todos los gustos:

  • Apoyar campañas por Internet. Esta opción permite apoyar campañas de manera puntual. En este caso, no se exige una colaboración periódica. Basta darse de alta en los newsletter o boletines que envían las ONG para conocer todas sus novedades y apoyar campañas vía online, cuando surja la ocasión. Cada vez más, las ONG recaban apoyo de la ciudadanía para enviar cartas a gobiernos o empresas, que supongan una presión que propicie cambios. Algunas de las ONG más activas en este sentido y con iniciativas que apoyar en la actualidad son:
    • Alianza por la Solidaridad, en defensa del derecho de las mujeres africanas a ser propietarias de las tierras.
    • Amnistía Internacional, a favor de que las mujeres en Arabia Saudí puedan conducir o de que se apoye a las personas refugiadas que huyen de Siria, entre muchas otras causas.
    • Survival solicita firmas para que Perú proteja a los pueblos indígenas aislados.
  • Donaciones a un euro. Esta es la opción más sencilla para quienes quieren comprometerse con las ONG, pero cuentan con pocos recursos; para quienes desean colaborar con varias ONG sin dejarse los ahorros en ello; o para quienes carecen de tiempo libre y recurren a las aportaciones económicas como modo de apoyar el trabajo de las organizaciones no lucrativas. Ser socio de una ONG desde un euro al mes es una manera sencilla de apoyar el futuro de miles de personas, con un pequeño esfuerzo económico: 12 euros al año. Es una iniciativa que no se dejará en un mes. Y si no, basta ver este vídeo de Manos Unidas:
  • Voluntariado online. Para quienes disponen de poco tiempo y dinero, el voluntariado online es la mejor opción. Las personas voluntarias deciden cuánto tiempo dedicar a la tarea que se les asigne, pueden desempeñarla desde casa o desde cualquier lugar donde tengan a mano un ordenador y, con frecuencia, pueden reflejar esta práctica en su currículum, ya que es una experiencia en la que desarrollan sus capacidades profesionales o bien aprenden unas nuevas. Cuanto más tiempo se tenga disponible, más se podrá dedicar a esta actividad. Incluso Naciones Unidas cuenta con un servicio de voluntariado online.
  • Voluntariado presencial. Plataformas de voluntariado y coordinadoras de ONG recopilan ofertas para colaborar como voluntarios. Merece la pena echar un vistazo a las propuestas. Los estudios realizados hasta el momento indican que la media de tiempo que una persona realiza tareas de voluntariado es de seis meses. Sin embargo, hay muchos ejemplos de personas voluntarias que permanecen en organizaciones durante años y que no conciben su modo de vida sin esta parte importante de su día a día. Así lo atestiguan los siguientes vídeos:
  • Ser cooperante. En primer lugar, hay que ser consciente de que la cooperación es un trabajo del cual dependen muchas personas. Para trabajar como cooperante, se debe contar con preparación previa, tener una personalidad flexible y capacidad de trabajo en equipo. Algunos profesionales son muy valorados en cooperación, como el personal sanitario, logistas, personal de administración y finanzas, ingenieros, arquitectos, profesores, abogados, periodistas, nutricionistas, farmacéuticos, trabajadores sociales, fisioterapeutas, politólogos, sociólogos y personas con formación en cooperación para el desarrollo.
Iniciativas a favor del comercio justo

Los productos de comercio justo se pueden consumir en las distintas comidas que se realizan a lo largo del día. Adquirir estos productos significa asegurar un salario digno a los productores y garantizar que en en ningún caso el producto que se adquiere ha sido elaborado por niños. Pero el compromiso no solo es con las personas, sino también con el planeta, ya que el comercio justo cuida el medio ambiente, al no emplear fertilizantes ni otros productos químicos. Oxfam Intermón trabaja con varias organizaciones “herederas de las cooperativas autogestionadas que impulsaba Gandhi” y que permiten a miles de personas “recibir un salario justo, salir de la pobreza y llevar una vida digna”, señala la organización. El siguiente vídeo es solo un ejemplo de lo mucho que se consigue con este modo de comercio, que apuesta por la dignidad de las personas y el buenhacer de los consumidores.

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