Traductores online

Una ayuda para navegar por otras lenguas, no una solución definitiva
Por Nacho Rojo 27 de agosto de 2003

Los sistemas automáticos de traducción están todavía lejos de ser perfectos, pero son herramientas útiles para hacerse una idea del significado de un texto escrito en una lengua no conocida. La tecnología ha avanzado mucho en este campo y ha puesto al alcance del usuario pequeñas herramientas que hablan varios idiomas, programas de traducción para instalar en el ordenador o la PDA y sitios web que traducen textos o páginas enteras.

Tecnología lingüística

Para compensar la abrumadora presencia de los contenidos en inglés en Internet, el internauta no angloparlante puede echar mano de las herramientas que ésta pone en sus manos para manejarse en varias lenguas. Además de los diccionarios online, muchos de los cuales son también traductores multilingües, hay empresas dedicadas a desarrollar tecnología para sobrevivir en la Torre de Babel que se ha reunido en la Red.

Existen sitios web donde se pueden introducir textos más o menos largos para que aparezcan en el idioma escogido en cuestión de segundos, con un solo clic de ratón. O que facilitan la versión en otro idioma de una página web simplemente introduciendo su URL (dirección en Internet). También hay pequeños aparatos para llevar en el bolsillo en los viajes, que hacen las veces de intérpretes, y programas que se instalan en el ordenador o los dispositivos móviles que traducen palabras o frases e, incluso, pronuncian correctamente en varios idiomas.

La llamada ‘industria de la lengua’ es un campo multidisciplinar que ha sido potenciado por las nuevas tecnologías. Una vez que las palabras se han digitalizado, convertido en unos y ceros, las máquinas son capaces de tratar el lenguaje para realizar búsquedas, clasificar la información, traducir, etc. La tecnología lingüística, todavía en ciernes, investiga y desarrolla nuevas herramientas en varios campos:

  • Publicaciones electrónicas (diccionarios y enciclopedias en CD-ROM).
  • Sistemas para gestionar y recuperar la información.
  • Herramientas para la escritura, como los editores de texto, capaces de corregir la ortografía y gramática o sugerir sinónimos.
  • Y la traducción y tratamiento multilingüe de los textos. Traducciones automáticas y traducciones asistidas por ordenador que han alcanzado un gran auge con la universalización de la informática y la expansión de Internet.

Así, la lengua genera una actividad económica notable. El negocio entorno al idioma español, según refleja el libro El valor económico de la lengua española, aporta alrededor del 15% del producto interior bruto (PIB) de España. Y en este contexto Internet tiene mucho que aportar por la infinidad de multinacionales con presencia en la Red o las empresas que, simplemente, quieren que su página o sus correos electrónicos alcancen mayor audiencia incluyendo versiones en varios idiomas. Para ello hay compañías que ofrecen la traducción de sitios web e incluso su ‘adaptación cultural’, que valora aspectos que van más allá de la mera traducción de textos.

Pero la inmensa mayoría de las páginas web sólo cuentan con la versión en el idioma original, máxime las dedicadas a la información, por lo que es útil conocer y utilizar las posibilidades que brindan el software e Internet para la traducción, o más bien interpretación, de textos.

Traductores multilingües

Dicen algunas páginas especializadas que “la traducción automática empieza ya a ser una realidad”, lo que supone una buena noticia para sobrevivir en una Red que habla mayoritariamente inglés. Sin embargo, no hay más que poner a prueba los traductores automáticos para darse cuenta de que queda mucho trabajo por hacer.

“En un lugar de Mancha, que de nombre no deseo decidir a mí, no hay el tiempo largo que vivió hidalgo en los de la lanza en astillero, viejo protector de funcionamiento, el rocín flaco y el galgo”, es el comienzo de Don Quijote, traducido del español al inglés y de nuevo al español, según la peculiar versión del traductor de Altavista, Babel Fish.

Babel Fish es uno de las herramientas online pioneras en traducción automática. Traduce textos de hasta 150 palabras y páginas web enteras del español al inglés y viceversa, además de otras traducciones cruzadas entre siete idiomas. Así, un británico puede tratar de leer consumer.es o elpais.es gracias a la versión inglesa de Babel Fish, o un hispanohablante intentar enterarse de la actualidad tecnológica en News.com en castellano. Además, Babel Fish ofrece la posibilidad de agregar su sistema de traducción a cualquier página pegando una simple línea de código HTML.

Google también cuenta con su página para traducir textos o webs: www.translate.google.com, servicio al que se puede acceder directamente desde los resultados de búsqueda, siempre y cuando Google tenga “un alto grado de confianza acerca del idioma de la página seleccionada”.

Como explica el propio Google, “desafortunadamente, aún el software más sofisticado de la actualidad no se aproxima a la fluidez de una persona nativa ni posee las habilidades de un traductor profesional. La traducción automática es muy complicada, ya que el significado de las palabras depende del contexto en el que se usan, así como de la comprensión de las estructuras y las reglas del idioma. Aunque muchos ingenieros y lingüistas trabajan en ello, todavía falta mucho para que alguien pueda ofrecer una traducción rápida e inteligible”.

Sin embargo, no se deben descartar la ayuda de las traducciones automáticas online para casos en los que sea suficiente comprender ‘de qué va’ un texto en un idioma desconocido sin exigir precisión en el lenguaje. Hay otras muchas páginas desde donde acceder a herramientas para manejarse entre varias lenguas:

  • Foreingworld.com ofrece traducción de términos (más de 265 diccionarios en línea en 73 idiomas), textos y miles de glosarios. Sus páginas se consultan en varios idiomas, entre ellos en español y catalán. En la página de diccionarios, se puede introducir un término en un mismo cajetín para encontrar su significado en varios diccionarios o traducirlo a una veintena de idiomas.
  • Ya.com cuenta con un traductor de páginas web y de palabras/frases en varios idiomas.
  • También en español y con el explícito nombre de TraduceGratis.com, esta página traduce textos y webs a través de Systran, al igual que Babel Fish, y ofrece enlaces a otros traductores y diccionarios online o para descargar.
  • En FreeTranslation se pueden traducir textos de hasta 1.800 palabras, además de páginas web enteras. Pagando se puede optar por los servicios de traductores humanos o, más barato, de traducciones automáticas editadas por profesionales.

Si no es tan sencillo encontrar sitios donde traducir textos, sí lo es encontrar páginas para traducir palabras a múltiples idiomas.

  • Yourdictionary.com recopila diccionarios de nada menos que 280 idiomas (de los 6.800 y 41.000 dialectos que recoge Etnologue.com), además de cursos (100 idiomas), glosarios y otros recursos lingüísticos.
  • En Allwords se encuentran centenares de enlaces y se puede traducir una palabra, de forma simultánea, al español, inglés, alemán, francés e italiano.
  • Logos es otro portal multilingüe para realizar todo tipo de traducciones cruzadas, incluyendo lenguas como el catalán o el gallego. A través de Verba Volant, ofrece la suscripción a un boletín electrónico que cada día envía frases célebres de poetas, escritores o filósofos traducidas a 60 idiomas.
  • Euridicautom traduce términos en todas las lenguas de la Unión Europea.

El viajero necesita siempre manejar cuatro palabras básicas para moverse en un país extranjero. Lo normal es comprar un libro-guía que incluya las frases y expresiones más usuales, que, por supuesto, también se puede adquirir en la Red en sitios como Lonely Planet.

Pero también se lo puede ahorrar gracias a glosarios online como los que recoge Language Automation o acudiendo a sitios especializados:

  • Para aprender lo básico hay páginas como Travlang, con numerosos recursos relacionados con viajes e idiomas.
  • Antes de viajar a África merece la pena darse una vuelta por ikuska.com para anotar o imprimir el vocabulario esencial de la(s) lengua(s) del país de destino.

Programas de traducción

No hace falta navegar para utilizar el ordenador como profesor de idiomas. Además de todo tipo de diccionarios y enciclopedias en CD-ROM, o los correctores ortográficos y diccionarios de sinónimos de los editores de texto, existen numerosos programas para traducir.

  • Babylon es el más conocido y quizá el mejor. Su único problema es que cuesta 50 euros, aunque se puede descargar una versión de prueba. Con un simple clic de ratón sobre la palabra en pantalla, Babylon devuelve la traducción en el idioma elegido según varias fuentes, incluidos numerosos glosarios especializados. También convierte todo tipo de medidas, divisas y horarios.

  • Completamente gratuito pero mucho más pesado de usar (abre el navegador tras introducir un término),Xanadu es un traductor que además contiene un directorio con más de 4.000 enlaces a glosarios, integra un cajetín para buscar en la web a través de una docena de buscadores y enciclopedias, un canal de noticias sobre el idioma e información de contacto para localizar traductores profesionales..

  • The Internet Dictionary Project es un proyecto colaborativo para crear un software de traducción gratuito. La cuarta edición del IDP Companion, que incluye vocablos en español, italiano, alemán, francés, latín y portugués, todavía deja bastante que desear.

  • WordReference.com instala un plug-in (un añadido al navegador) que introduce en el desplegable que aparece al pulsar el botón derecho del ratón (menú contextual) la opción de traducir una palabra del inglés al español o viceversa.

  • Si se trata de comprar un programa de traducción, WorldLanguage dispone de medio millar de productos en 32 idiomas.

Por supuesto, entre la ingente cantidad de programas para PDAs, existe una gran variedad de diccionarios y traductores, que ahora se desarrollan para teléfonos móviles. Y también se puede encontrar aparatos específico para traducir, pequeños diccionarios electrónicos (de texto y voz) o ingenios más sofisticados, como el Phraselator, que traduce con voz la frase tecleada o los lapiceros-traductores, escáners con forma de lápiz que leen la palabra que se remarca.

Traductores humanos

Incluso en la relación con los todavía absolutamente imprescindibles traductores e intérpretes humanos, ahora hay a menudo una máquina de por medio. Internet sirve como herramienta paralocalizar al traductor adecuado, contratar sus servicios e incluso como canal para enviar y recibir los trabajos. Gracias a el correo electrónico, las traducciones casi instantáneas de textos, realizadas por un profesional nativo radicado en cualquier parte del planeta, se han convertido en realidad.

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