El Ministerio de Agricultura, Recursos Naturales y Pesca holandés ha establecido medidas de prevención tras detectar, el pasado mes de mayo, pienso animal contaminado con la hormona MPA (Medroxy Progesterona Acetato), sustancia sintética prohibida por la Comisión Europea para alimentación animal.
Según una investigación llevada a cabo por responsables del Ministerio, el pasado mes de mayo se detectaron problemas en algunas cerdas que habían sido alimentadas con pienso contaminado con la hormona citada, que se había extendido además en la industria de piensos compuestos. En concreto, se detectó la contaminación en ganado porcino de 26 explotaciones del país.
Tras la investigación, el Ministerio de Agricultura, el Consejo de Ganada, Carne y Huevos (PVV) y las organizaciones sectoriales han acordado comprar los cerdos de las explotaciones afectadas. Estos animales sólo pueden venderse en el mercado nacional si han sido analizados y el test de MPA haya dado negativo. En total, se calcula podrán comercializarse unos 55.000 animales.
La información remitida por el Gobierno holandés asegura que no existe riesgo para la salud pública ya que se han tomado las medidas necesarios para que la contaminación no se extienda, algo que están llevando a cabo desde los ministerios de Agricultura y de Sanidad Pública y desde la Autoridad Alimentaria. Por el momento, aún se están realizando test en un centenar de explotaciones, cuya actividad no contempla aún la venta de cerdos.
Por otra parte, el problema surgido a raíz de la contaminación de piensos destinados a alimentación animal ha puesto de manifiesto la necesidad de regular el sector, algo que podría suscribirse desde el Consejo de Piensos, que tiene la concesión de la licencia GMP (good manufacturing practice). Sin embargo, el Ministerio de Agricultura considera que estas herramientas son insuficientes, por lo que se prevé una ampliación del control de dicho Ministerio.
