El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha propuesto a las organizaciones de productores y agentes sociales agrarios mantener una distancia de 25 metros entre los cultivos de organismos modificados genéticamente y los ecológicos y tradicionales. El objetivo, evitar posibles contaminaciones.
Esta distancia ya se propuso en la constitución de la Comisión Nacional de Biovigilancia celebrada el pasado mes de febrero con el anterior equipo de Gobierno, para fijar los contenidos de la futura norma sobre coexistencia entre los transgénicos y los demás cultivos.
Una vez que se apruebe esta norma, España será el segundo Estado miembro de la Unión Europea (UE) tras Alemania que cuente con ella, señaló el secretario general de Agricultura, Fernando Moraleda.
La distancia será el punto más importante del Real Decreto del Plan de Vigilancia de Coexistencia entre cultivos, cuyo borrador se debatió ayer en la Comisión Nacional de Biovigilancia.
