La elección de una conífera, tanto para formar parte de terrazas y balcones como para ser plantada sobre el sustrato del jardín, depende de muchos factores, desde las condiciones del suelo, la exposición, el crecimiento, al propio gusto por un determinado porte o colorido.
Lo más neófitos en materia de jardinería creen que la única posibilidad de las coníferas, cromáticamente hablando, es que sean verdes. Nada más lejos de la realidad, pues además de existir una gran gama de verdes, las coníferas también pueden presentar un tinte azulado o un bello tono grisáceo, del mismo modo también hay ejemplares dorados o amarillos.
Por si el color va a ser uno de los factores esenciales en su elección, a continuación se ofrece un breve listado con las especies que se pueden encontrar en cada tonalidad:
-Tonos azules y azul-grisáceos
–Abies arizonica compacta
–Abies pinsapo glauca
–Cedrus atlántica glauca
–Chamaencyparis lawsoniana en su variedad allumii y columnaris
–Cupressus arizonica
–Juniperus chinensis pyramidalis
–Juniperus horizontallis glauca
–Juniperus squamata meyeri
–Picea pungens koster
–Pinus strobus nana
-Tonos amarillos o dorados:
–Cedrus atlántica aurea
–Chamaencyparis lawsoniana en sus variedades ellwood’s gold, minima aurea, lane, lutea y stewartii
–Cupressus macrocarpa goldcrest
–Juniperus mdia old gold
–Taxus baccata en sus variedades fastigiata aureomarginata y semperaurea
–Thuja occidentalis rheingold
–Thuja orientalis aurea nana y rosedalis
–Thija plicata zebrina
Teniendo esto en cuenta puede realizar sutiles combinaciones de colores para aprovechar la gama cromática de estos ejemplares.
