Una de las formas más sencillas de decorar un garaje consiste en alicatar su superficie con azulejos y embaldosar su suelo, facilitando la limpieza del mismo. Si el suelo está acementado y queremos guardar el coche es recomendable dejarlo como está para evitar que pueda deteriorarse por el exceso de peso del vehículo.
Si disponemos de espacio podemos albergar en una zona del garaje un pequeño centro de relax, con una cocina y una mesa en la que poder preparar comidas con los amigos sin tener que manchar el interior de nuestra vivienda.
Para decorar las paredes de nuestro espacio de reunión podemos utilizar azulejos y baldosas, como en el resto del garaje. Este material facilitará la limpieza de la zona. También podemos optar por colocar un friso de madera que otorgue un aspecto más acogedor a esa parte del garaje.