Las personas que tengan domiciliada su nómina en el banco tendrán más fácil acceder a un adelanto de la misma, incluso de varias mensualidades, y siempre bajo unas condiciones más beneficiosas para sus intereses. Así, podrán disponer de un dinero extra para cubrir cualquier imprevisto: desde un desajuste en sus cuentas hasta la financiación de sus compras, sin olvidarse de algún gasto no contemplado en su presupuesto. De esta manera, es posible conseguir adelantos de la nómina de hasta 9.000 euros, sin tener que acudir a otro tipo de créditos más exigentes en cuanto a los tipos de interés. Con el fin de lograr un buen adelanto de la nómina, en este artículo se encuentran las mejores fórmulas para habilitar esta línea de crédito y se detalla en qué condiciones se puede desarrollar la operación.
¿Cómo conseguir un adelanto de la nómina?
La estrategia de pedir un adelanto de la nómina para dotarse de liquidez cuenta con una doble alternativa.Por una parte están los anticipos de nómina que aceptan algunas entidades. Esta es la forma más satisfactoria para conseguir el objetivo. Suelen comercializarlos bajo tipos de interés más suaves, y hasta exentos de ellos en algunas propuestas bancarias, y sin incluir en la operación ninguna comisión.
La otra opción consiste en un préstamo que parte de la domiciliación de la nómina, en donde los intereses serán mayores que en los anticipos, pero sin llegar a los aplicados a los créditos más convencionales. A partir de estas premisas, el único requisito que se le demandará al cliente es que tenga domiciliada su nómina en el banco. No hará falta un saldo mínimo, ni contratar otros productos bancarios.
A partir de estas características se desarrollan una serie de propuestas, que se mueven bajo adelantos adaptados a todas las necesidades de las familias, entre 300 y 9.000 euros, en donde será fundamental el salario de los solicitantes para obtenerlo por las cuantías más altas. El importe no será lo mismo para un cliente que cuente con unos ingresos de 800 euros, que para otro que sobrepase los 2.000.
Anticipos de hasta 9.000 euros
Desde esta perspectiva, Banco Santander incorpora el servicio de anticipo de nómina, por el que puede obtenerse hasta 9.000 euros o dos nóminas completas. Podrá devolverse en un plazo máximo de ocho meses y el único requisito es tener la nómina domiciliada.
El Anticipo Nómina de Unicaja es otra alternativa que disponen los clientes bancarios para dotarse de liquidez en un determinado momento. Anticipa el importe de hasta tres mensualidades, con un importe máximo de 5.000 euros, que podrá devolverse en 10 meses.
Openbank se ha decidido por esta estrategia comercial a través de la Cuenta Nómina. Adelanta la cantidad de la nómina que tenga el cliente domiciliada, sin gastos ni comisiones de apertura.
Banco Sabadell también incorpora este modelo para favorecer los intereses de los clientes vinculados con la entidad. Les concede su nómina mensual por una comisión fija (50 euros) y con un plazo de devolución, que puede elegirse pagar entre uno, tres o seis meses. Otorga un importe máximo de hasta 2.000 euros.
Préstamos a través de la nómina
Liberbank admite esta operación bancaria, al incluir en su oferta el Anticipo Nómina, en la que sus clientes pueden solicitar un adelanto de entre 300 y 6.000 euros, para devolverlo en un plazo máximo de seis meses. En esta ocasión solo es necesario tener domiciliada la nómina en el banco, sin mayores requerimientos.
Cajamar parte de otra estrategia diferente, pero con la misma finalidad: dotar al cliente de una línea de crédito permanente. A través del Préstamo Anticipo Nómina podrá conseguirse hasta 6.000 euros, con un plazo devolución que alcanza los 12 meses, y en donde se aplicará un tipo de interés fijo, con comisiones de apertura y de amortización anticipada.
Estas líneas de crédito son muy beneficiosas para los usuarios bancarios, por su sencillez y rapidez; pero también porque su concesión es casi instantánea, sin tener que esperar a que se apruebe la solicitud. En cierta forma, es una vía de financiación que está concedida de antemano. Solo hay que cumplir con una serie de requisitos, por otra parte fáciles de cumplimentar, que serán los siguientes:
- Domiciliar la nómina: todas las operaciones de financiación pasarán por este proceso bancario, que en muchas ocasiones puede ampliarse a pensiones, ingresos regulares y, de forma más esporádica, a las prestaciones por desempleo.
- Canalizadas a través de una cuenta: su formalización deberá partir de la contratación de una cuenta (nómina) que admita la vinculación de sus clientes y que están comercializadas con mayores ventajas y servicios para estas personas.
- Desde un límite mínimo: cada cuenta requiere unos ingresos mínimos, que no en todos los casos son los mismos. Las hay para aportaciones de solo 600 euros, a otras más exigentes que requieren un salario por encima de 2.000 euros.
