Los perros adoran los viajes. Salvo contadas excepciones, los canes son nómadas naturales acostumbrados a los cambios de escenarios y paisaje y ansiosos por hacer nuevos amigos, peludos y humanos. Los gatos, por el contrario, son menos amigos de los cambios; pero incluso para los felinos el tren es uno de los medios colectivos de transporte más seguro. Aprender a viajar con perros y gatos requiere descubrir algunos trucos para hacer que esos trayectos les sean más cómodos. Pero no solo eso. Conocer las normas que rigen en los diferentes transportes ferroviarios también es importante. En este artículo se muestra cómo viajar con canes y felinos en tren esta Semana Santa.
Viajar con perro o gato en tren por España
Los perros son amantes de los viajes. Aprender a viajar en tren con canes resulta muy interesante, pues es un medio de transporte cómodo y de los más seguros para ellos. Pero el ferrocarril también es una buena opción para los gatos viajeros, siempre que vayan dentro de su confortable y seguro transportín felino.
Pero, ¿por dónde comenzar? Lo primero que hay que saber es que cada trayecto ferroviario tiene sus propias normas respecto a los perros y gatos viajeros. Es decir, los trenes de cercanías, medio y largo recorrido ofrecen distintas tarifas y grados de permisividad para los animales que viajan en ellos.
¿Cuál es la clave, entonces? Informarse antes de emprender el viaje y ser conscientes de que, a menudo, los felinos y canes pequeños, de hasta 10 kilos de peso, encontrarán menos problemas para viajar por España en este medio de transporte durante esta Semana Santa.
Viajar en tren con perros o gatos educados
Además de la normativa, el comportamiento del perro o gato es una de las claves más importantes para que el peludo compañero no tenga problemas para viajar en tren por nuestro país.
Renfe aclara que las mascotas pueden ir en sus vagones, si se cumplen ciertos requisitos: «Se admiten pequeños animales domésticos, siempre bajo la custodia del viajero que los lleve, si no se oponen los otros viajeros o se producen molestias a los mismos«. En otras palabras: el comportamiento del can o felino viajero es esencial para llegar sin sobresaltos al destino en cuestión.
Viajes con perro o gato en tren: ojo al tamaño
El tamaño del animal es uno de los obstáculos más frecuentes que los dueños de mascotas se encuentran al viajar con ellas. Renfe acepta a perros cuyo peso no exceda de 10 kilos. Esto excluye a los canes mayores de hacer un viaje en ferrocarril por el interior de España, con independencia del carácter de la mascota. Para los gatos es más sencillo, ya que pocos son los que superan este límite de tamaño.
Los responsables de la empresa pública también imponen otras limitaciones de espacio para viajar en tren con el peludo compañero. La compañía española de ferrocarriles solo acepta un único animal por pasajero, «siempre dentro de una jaula o transportín, cuyas dimensiones no superen 60 centímetros de largo y 35 centímetros de ancho».
Para mayor concreción, se puede consultar el reglamento completo de Renfe para los viajes con canes y felinos.
Billetes de tren para perros y gatos, ¿cuánto cuestan?
El precio de los billetes para perros y gatos viajeros en tren varía en función del recorrido. ¿La buena noticia? Los trenes de cercanías, que hacen distancias cortas, ¡son gratis para los animales!
En los desplazamientos de largo y medio recorrido, el billete vale, en general, la mitad del coste del pasaje de su dueño. «El importe que se abonará será el 50% del billete de Tarifa General del tren y clase correspondiente en el que se efectúe el viaje, no pudiéndose acoger a otras tarifas o descuentos», advierten desde Renfe. Una excepción: los perros guía, que ayudan a las personas invidentes en sus desplazamientos, no necesitan pagar billete.
Viajar en tren con perros o gatos fuera de España
Las limitaciones para ir con canes o felinos en ferrocarriles de España no son la pauta general de otros países de la Unión Europea. Un caso: los viajes ferroviarios son gratuitos para perros y gatos en Reino Unido, siempre que no ocupen un asiento. La compañía británica permite, además, que sean dos, y no uno, los animales que viajen por persona.
Conviene recordar, en cualquier caso, que no hay una única regla para viajar con la mascota en tren por Europa. Esto explica que, antes de emprender el recorrido, sea recomendable consultar el sitio web de la empresa o ponerse en contacto con ella.
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