Castilla-La Mancha aprueba una normativa para regular la gestión de los vehículos al término de su vida útil

Pretende mejorar la protección ambiental a través de la correcta eliminación de los residuos procedentes de los coches
Por EROSKI Consumer 7 de enero de 2002

La Consejería de Agricultura y Medio Ambiente de Castilla- La Mancha ha aprobado una nueva normativa que regula los requisitos técnicos y administrativos de la gestión de vehículos al final de su vida útil, según una Orden publicada en el Diario Oficial la comunidad.

Esta normativa, mediante la cual la Consejería pretende mejorar la protección ambiental, fija una serie de medidas básicas encaminadas a reducir la eliminación de los residuos procedentes de los vehículos mediante una correcta gestión de los mismos, dando prioridad a la reutilización, el reciclado y otras formas de valorización tanto de los vehículos como de sus componentes.

Según la Orden, las instalaciones o desguaces que están funcionando en la actualidad tendrán que adaptarse a los nuevos requisitos técnicos y administrativos, fijados por la Unión Europea en esta materia, en el plazo máximo de un año. Además, las nuevas instalaciones que se creen deberán acreditar el cumplimiento de los citados requisitos y se someterán al trámite de Evaluación de Impacto Ambiental.

Requisitos técnicos

Los requisitos técnicos que exige la nueva norma son los mismos que los establecidos en la Directiva Europea que entro en vigor el pasado 1 de enero, y que considera a todos los vehículos fuera de uso de la UE como residuos peligrosos.

Así, las instalaciones que se encargarán de gestionar estos residuos deberán disponer de zonas adecuadas al número de vehículos a almacenar, estar dotadas de pavimento impermeable, con instalaciones para la recogida de derrames de decantación y separación de grasas. Además, tendrán equipos para el tratamiento de aguas conformes a la reglamentación sanitaria y medioambiental.

También serán necesarios contenedores adecuados para almacenar las baterías, filtros y condensadores, así como depósitos adecuados para almacenar separadamente los fluidos: combustible, aceite de motor, de cajas de cambio, de transmisión, líquidos de refrigeración, anticongelante, ácido de baterías, líquido de frenos, etc. y también zonas apropiadas para almacenar los neumáticos usados.

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