Salvarse bajo el agua

Unos simples consejos pueden salvar la vida
Por EROSKI Consumer 16 de noviembre de 2005

La caída de un vehículo a un cauce de agua es un accidente poco frecuente pero que supone un gran peligro. El primer consejo es reaccionar con tranquilidad. Los nervios en momentos cruciales sólo suelen servir para complicar la situación. El primer paso es desabrocharse los cinturones de seguridad.

Posteriormente hay que comprobar si el coche ha quedado a flote. Si es así, hay que salir rápidamente por las ventanillas con cuidado de no engancharnos con el cinturón, el volante o cualquier otro elemento del vehículo.

Cuando el coche se ha sumergido no hay que intentar abrir las puertas. La diferencia de presiones entre el interior y el exterior lo impide, igual que cuando intentamos abrir la tapa de un envase cerrado al vacío.

Por tanto, hay que esperar con calma a que el habitáculo se llene de agua. Aprovecharemos la bolsa de aire que se forma contra el techo para respirar. En ese momento se podrá tomar una bocanada de aire, abrir la puerta y salir a nado a la superficie.

Caer al agua con el coche es una situación difícil pero superable si se mantiene la calma y se actúa correctamente en cada momento.

Sigue a Consumer en Instagram, X, Threads, Facebook, Linkedin o Youtube