Álava cubre con malla los corrales al aire libre situados en las zonas de riesgo aviar

Las medidas de seguridad afectan a 6 municipios y 19 pueblos cercanos a Salburua y los embalses del Zadorra
Por EROSKI Consumer 3 de septiembre de 2006

Las autoridades no bajan la guardia frente a la gripe aviar. La Diputación foral de Álava vigila con mayor intensidad desde el viernes, coincidiendo con el tiempo de las grandes migraciones de aves hacia el Sur, los tres grandes humedales del territorio: Salburua, donde apareció en junio el primer caso de ave infectada por el virus del H5N1 en España, y los embalses de Ullibarri y Villarreal.

Los tres enclaves fueron declarados el 4 de agosto «zona de especial riesgo por influencia aviaria» por el Ministerio de Agricultura, junto a una larga lista de humedales españoles.

Las medidas de seguridad y vigilancia afectan a 6 municipios y 19 pequeños pueblos, situados en el perímetro de 3 kilómetros dentro de las áreas de influencia de los humedales. Las medidas se adoptan después de que el 26 de julio se levantaran las obligaciones establecidas tras la aparición del primer caso, y de que el 7 de agosto se suspendiera la cuarentena sobre un territorio de 10 kilómetros alrededor de Salburua.

En las zonas de riesgo se restringe la caza con reclamo, se prohíbe criar patos y gansos con otras especies de aves de corral, se impide la presencia de este tipo de pájaros en concentraciones de animales como ferias y, lo más importante, se prohíbe su cría al aire libre, aunque se autorizará en todas aquellas granjas en las que se coloquen telas o mallas pajareras que impidan cualquier contacto entre las aves de corral y las salvajes.

Otra de las nuevas instrucciones puestas en marcha es la realización de un registro con las explotaciones que no tengan carácter comercial. Se identificará al propietario y las condiciones de su explotación, desde el número de animales hasta el sistema de cría. La orden foral establece también la obligación de cualquier persona, especialmente los veterinarios, los activistas de grupos proteccionistas y cazadores de notificar episodios de ave muerta o con síntomas de gripe aviar. Para detectar precozmente la enfermedad se incluye la caída en el consumo del pienso y agua superior al 20%, disminución de la puesta y la mortalidad superior al 3% sin causa justificada.

Sigue a Consumer en Instagram, X, Threads, Facebook, Linkedin o Youtube