Científicos de Estados Unidos han descubierto cómo las familias de los enfermos y los médicos pueden predecir mejor la esperanza de vida de los afectados por este mal. La clave, según su estudio, está en la medición de varios aspectos clínicos clave del Alzheimer al poco tiempo del diagnóstico.
Así, los médicos podrán afinar los presupuestos de costes y planes de servicios para el creciente número de personas que se encuentran en riesgo de sufrir esta enfermedad.
Las 23.000 personas en las que se centró este estudio fueron evaluadas por problemas cognitivos y de memoria, y examinadas por otras condiciones: afecciones cardiacas, diabetes, infarto, depresión e incontinencia urinaria. También se evaluó la agitación, comportamiento errático, paranoia, caídas y dificultades al caminar.
Como conclusión el informe indica que, en los años posteriores al diagnóstico, las personas con Alzheimer sobreviven la mitad de tiempo que los sanos de edades similares y las mujeres enfermas vivirían más tiempo que los hombres.