La Seguridad Social deberá indemnizar a un paciente con 60.101 euros por el retraso en una operación

Este hecho permitirá a partir de ahora reclamar por el mal funcionamiento de los servicios públicos o la deficiente atención prestada
Por EROSKI Consumer 9 de mayo de 2002

La sentencia dictada por la Sala Tercera del Tribunal Supremo ha condenado a la Seguridad Social a indemnizar, con 60.101 euros, a José Pérez Izaguirre, un enfermo de cáncer maxilofacial que tuvo que esperar seis meses para que el Hospital «La Alcaldesa» de San Lorenzo de El Escorial (Madrid) remitiera sus informes médicos al Hospital «La Paz». Un hecho sin precedentes que permitirá a cualquier paciente hacer reclamaciones patrimoniales a la Administración por el mal funcionamiento de los servicios públicos o por la deficiente atención prestada en hospitales y centros sanitarios.

Según María del Mar Cadavid, abogada de José Pérez, «esta sentencia, al generar jurisprudencia, abre las puertas a aquellos ciudadanos que quieran recurrir a los tribunales, si es que les ha ocurrido algo parecido», señaló. El caso se remonta a 1994, año en el que José Pérez Izaguirre ingresa en el Hospital «La Alcaldesa» de El Escorial para realizar unas pruebas que verificaron el avance progresivo de su enfermedad. La gravedad de su situación no aceleró su ingreso ya que el Hospital tardó seis meses en remitir su informe médico. Esta negligencia causó en el paciente unas secuelas irreversibles en su enfermedad, que se ha convertido en crítica.

Según el Ministerio de Sanidad, la Administración desestimó el recurso porque la reclamación se realizó fuera del plazo que establece la ley. «El demandante hizo la reclamación tres años después de que se produjeran los hechos, cuando la ley indica que el plazo máximo para reclamar es de un año», afirmó. Sin embargo, según María del Mar Cadavid, «el paciente no pudo realizar la reclamación con anterioridad debido a su débil estado de salud, así que la ley ha tenido que amparar esta posibilidad», señaló la abogada.

Son muchos los ciudadanos que esperan que les reciba el especialista, que se les haga una determinada prueba o que se les opere. Muchas veces, las largas esperas pueden jugar en contra del paciente que -en ciertas especialidades- necesita la atención inmediata para una intervención eficaz.

Esperar sin desesperar

Es el caso de enfermos que necesitan pruebas diagnósticas como mamografías, la citología o la ecografía ginecológica y abdominal, fundamentales para una diagnóstico precoz. Según un estudio realizado por la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria y la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), las listas de espera varían según las especialidades. Ginecología y oftalmología son las que más se hacen de rogar.

La ginecología es una de las especialidades donde la detección precoz es más determinante para lograr la curación. Sin embargo, es el sector que más retrasos acumula. Según el estudio, desde que el médico de familia facilita el volante para el ginecólogo hasta que el paciente pueda ir a su consulta transcurren, de media, 68 días. En algunos casos llegan a superar los nueve meses. Es en Cataluña donde más debe esperar una mujer para ser atendida por su ginecólogo, con una espera media que ronda los 100 días mientras que Aragón es la comunidad autónoma que menos hace esperar a sus pacientes, con una media de 29 días. Las pruebas diagnósticas relacionadas con la ginecología como las mamografías y las ecografías ginecológicas tienen una espera media de 60 días.

La dermatología, otra de las especialidades con mayores quejas, tiene unas listas de espera cuya media supera los 46 días. Castilla La Mancha presenta la peor situación, con una espera media de 80 días, mientras que en el País Vasco sólo hay que aguardar, como media, un plazo de 24 días.

Sigue a Consumer en Instagram, X, Threads, Facebook, Linkedin o Youtube