La Dirección General de Consumo de La Rioja ha retirado de un comercio de «todo a cien» 30 muñecos de goma con forma de extraterrestres que, en contacto con agua u otros líquidos, aumentan hasta 600 veces su tamaño original en las 24 ó 48 horas siguientes.
El peligro de estos juguetes radica en los serios problemas de asfixia y daños gastrointestinales que pueden ocasionar si alguna persona, en especial los niños, los ingiere enteros o algunas de sus partes, fácilmente separables.
Este tipo de juguetes expandibles, que proceden de China, se localizaron por primera vez en Bélgica en 1997 a través de la Red de Alerta Europea, que advertía sobre siete modelos diferentes con formas de cocodrilo y animales salvajes, entre otros. Más tarde, Suecia avisaba de la comercialización de un caballito de mar con las mismas características.
En España se encontró otro modelo, con forma de cocodrilo, en Galicia y Murcia. A finales de 1999, la Junta de Extremadura alertó al Instituto Nacional de Consumo (INC) tras localizar unos muñecos con forma de feto que fueron posteriormente retirados del mercado. El último aviso a la Red de Alerta Europea ha sido precisamente el que ha llevado a retirar los mencionados 30 muñecos en la comunidad riojana.
