Rusia tiene previsto comenzar a producir a gran escala una vacuna contra la gripe aviar en aves a partir del próximo mes de abril, según anunció ayer el director del Centro de Investigación sobre la enfermedad, Oleg Kiselyov. «Necesitamos completar nuestros análisis» y «esperamos que comience a producirse (la vacuna) en abril», dijo Kiselyov, quien advirtió de que el mundo podría experimentar un brote a gran escala de gripe aviar en los dos próximos años.
El Ministerio de Agricultura ruso ha estado coordinando la producción de 100 millones de dosis de la vacuna para aves domésticas en Siberia y algunas regiones de los Urales, que están cerca de los lugares de paso de las aves migratorias. «Las vacunaciones comenzarían en primavera, cuando nacen los polluelos», señaló Gennady Onishchenko, del Servicio Federal de Derechos de los Consumidores y Bienestar. «La Duma (el Parlamento ruso) ya ha aprobado un aumento de los fondos destinados a los programas relativos a la gripe aviar», aunque no se ha establecido una cifra precisa, añadió.
Hasta el momento, más de 700.000 aves han muerto en Rusia a causa de la enfermedad o han sido sacrificadas en el esfuerzo por detener el avance del virus que la origina, según el Gobierno, sin que por el momento se hayan registrado casos en humanos.
