La ministra de Sanidad y Consumo, Ana Pastor, presentó ayer el proyecto AIRMED de telemedicina para fomentar la autonomía de los pacientes crónicos y mejorar su calidad de vida. Este proyecto comenzó a gestarse en 1998 para diseñar nuevos sistemas de comunicación digital encaminados a resolver problemas sanitarios relevantes.
La ministra Pastor, que presentó el proyecto durante la inauguración de una jornada sobre «Telemedicina y movilidad para pacientes crónicos y personas mayores», considera que AIRMED «ha permitido detectar una mejora de la calidad asistencial y de vida percibida por los pacientes», además de haber tenido «muy buena» acogida entre médicos y pacientes, al demostrar la capacidad de la tecnología para contribuir a la resolución de problemas sanitarios.
El proyecto, desarrollado conjuntamente por el Área de Investigación de Telemedicina y Sociedad de la Información del Instituto de Salud Carlos III y la Fundación Vodafone, pretendía en una primera fase desarrollar sistemas para realizar el seguimiento de pacientes mediante control cardiológico, telediagnóstico del Síndrome de Apnea del Sueño, seguimiento de enfermos con hospitalización a domicilio y preparación del proyecto «Prevención del Envejecimiento».
Pastor destacó la importancia de este proyecto para las personas mayores, ya que estudios recientes muestran que en un 50 por ciento de los casos, la dependencia y la dificultad para la vida diaria en personas mayores se ha producido «silenciosamente, de forma crónica y progresiva». AIRMED propiciaría un seguimiento y cuidado geriátrico de las personas mayores, con el objetivo de prevenir este deterioro.
AIRMED además de facilitar que el paciente informe diariamente sobre su estado, incluye una serie de test, que permiten evaluar aspectos relacionados con actividades cotidianas del paciente, como vestirse, asearse, efectuar la compra, realizar tareas en el hogar, subir escaleras, caminar, etcétera. Se complementan con una prueba de velocidad de movimiento.
Por otra parte la segunda fase del proyecto, que está destinada a la atención primaria y atención domiciliaria, se realizará con 700 pacientes, de cuatro áreas de salud de Madrid, en cuatro hospitales y diez centros de atención primaria y en el mismo participarán cuarenta médicos, diez enfermeras y cuatro ingenieros.
