Código de Conducta de las Universidades en materia de Cooperación al Desarrollo

Deberá ser ratificado por los órganos de gobierno correspondientes en cada Universidad
Por EROSKI Consumer 30 de noviembre de 2005
Img desarrollo
Imagen: CC Babsi Jones

Las diferentes universidades españolas vienen asumiendo en los últimos años un gran protagonismo en la Cooperación al Desarrollo, ejecutando distintas actividades orientadas a favorecer la solidaridad de los distintos sectores de la comunidad universitaria, tanto con Universidades como con otras instituciones y colectivos sociales de otros países. Esto se inscribe en el proceso abierto en los últimos años de ampliación del número y el tipo de agentes sociales que se han ido sumando a las labores solidarias de carácter internacional a favor de una mayor equidad y de un desarrollo humano y sostenible en el mundo.

Así es como se ha pasado de un contexto en el que un pequeño número de organizaciones sociales especializadas, las ONGD, se dedicaban a esta tarea en exclusiva, a otro en el que se ha producido la incorporación de muchas otras instituciones y colectivos sociales, que han comenzado a poner en marcha programas y proyectos de Cooperación al Desarrollo en distintos campos y en muy diversos países. Una situación que ha desembocado en una gran diversificación de las actuaciones en el campo de la cooperación, de los métodos de trabajo y de los objetivos específicos de los proyectos y programas

Actualmente hay una gran diversificación de actuaciones en el campo de la cooperación, de los métodos de trabajo y de los objetivos específicos de los proyectos y programas

Como consecuencia de todo ello, ha sido necesario contar con referencias claras para orientar el trabajo cooperación, de manera que sirva al mismo tiempo para llamar la atención sobre posibles prácticas incompatibles con el carácter solidario de la misma o con los objetivos antes mencionados. Por esta razón las distintas instituciones y organizaciones sociales se han ido dotando de diversos instrumentos con la finalidad de orientar su trabajo en forma de ‘Códigos de Conducta’, ‘Guías de Responsabilidad Social’, de ‘Transparencia’, de ‘Buenas Prácticas’, etc. Y en el caso concreto de las Universidades, la magnitud que han alcanzado las acciones llevadas a cabo en materia de Cooperación Internacional ha hecho que se debata la necesidad de acotar con mayor precisión el campo específico de la Cooperación Universitaria al Desarrollo, con el fin de preservar el carácter solidario de la misma, tanto en sus objetivos como en los métodos de trabajo utilizados.

Es así como las Universidades españolas decidieron en su reunión de Castellón en marzo de 2005 poner en marcha un proceso orientado a la elaboración de un Código de Conducta de las Universidades en materia de Cooperación al Desarrollo. Éste se divide en seis apartados y 31 artículos. No obstante, este Código deberá ser ratificado por los órganos de gobierno correspondientes en cada Universidad como símbolo del compromiso solidario de la misma y de su voluntad de ajustar las actividades de cooperación al desarrollo a los procedimientos y criterios éticos en él contemplados.

Primera parte del Código

Principios y Objetivos de la Cooperación Universitaria al Desarrollo:

  • 1.- La participación de las Universidades en la Cooperación Internacional al Desarrollo descansa en la consideración de este último como un proceso de cambios social, económico, político, cultural, tecnológico, etc. que, surgido de la voluntad colectiva requiere la organización participativa y el uso democrático del poder por los miembros de una colectividad.
  • 2.- Desde esta perspectiva, el desarrollo humano y sostenible se entiende como aquel capaz de crear condiciones de equidad que abran más y mejores oportunidades de vida digna a las personas para que desplieguen todas sus potencialidades, y capaz de preservar al mismo tiempo para las generaciones futuras los recursos naturales y el acervo cultural.
  • 3.- La Cooperación Universitaria al Desarrollo considera la pobreza como una situación de privación de los elementos esenciales necesarios para que el ser humano pueda vivir y desarrollarse con dignidad, y se plantea su erradicación como uno de sus fines prioritarios.
  • 4.- La educación de las personas y, dentro de ella, la educación superior, es un aspecto fundamental del proceso de ampliación de oportunidades y libertades de las personas y las sociedades. En consecuencia, el fortalecimiento de los sistemas universitarios constituye un objetivo esencial de la Cooperación Universitaria al Desarrollo.
  • 5.- La equidad de género y el empoderamiento de las mujeres son consustanciales al desarrollo humano y, al mismo tiempo, condiciones para el logro de los objetivos globales de desarrollo, por lo que constituyen una referencia básica de la Cooperación Universitaria al Desarrollo.
  • 6.- La Cooperación Universitaria al Desarrollo se basa asimismo en la consideración de que la sostenibilidad medioambiental y los derechos de las futuras generaciones son parte indispensable de los proyectos orientados a la promoción del desarrollo.
  • 7.- La paz, la democracia y el respeto a los derechos humanos constituyen fundamentos básicos de cualquier proceso orientado a la promoción de un desarrollo humano y sostenible, por lo que son asimismo objetivos esenciales de la Cooperación universitaria al Desarrollo.
Sigue a Consumer en Instagram, X, Threads, Facebook, Linkedin o Youtube