La ONG Cáritas ha registrado un importante incremento de las peticiones de ayuda económica para alimentos, vivienda y transporte durante el primer semestre de 2008 respecto al mismo periodo del año anterior a causa de la crisis económica, según revela el sondeo titulado «Observatorio de la realidad».
Los perfiles mayoritarios de las personas que han solicitado respaldo a esta institución responden a mujeres solas con hijos; parados recientes, procedentes de empleos de baja cualificación de los sectores de la construcción y la hostelería; familias jóvenes con niños pequeños; féminas inmigrantes reagrupadas de 40 o más años que buscan trabajo por primera vez, mayoritariamente como empleadas de hogar; y, de manera menos generalizada, mujeres mayores con pensiones no contributivas o pensiones mínimas que no llegan a cubrir sus necesidades básicas, así como inmigrantes irregulares menores y jóvenes «que han visto endurecidas sus condiciones de vida».
Se registró un 40% más de peticiones de solidaridad en los programas de familia, acogida, inmigrantes y empleo
A mitad del presente año, se registró un 40% más de peticiones de solidaridad en los programas de familia, acogida, inmigrantes y empleo de Cáritas. Silverio Agea, secretario general de la organización, subrayó que en este semestre «la crisis no había estallado en su plenitud», por lo que cree que a finales de año tendrá un impacto mucho mayor.
Cáritas ha constatado, asimismo, el aumento de demandas de retorno voluntario de inmigrantes, sobre todo a Ecuador y Bolivia. Al reducirse sus ahorros y posibilidades de ayuda, prefieren volver a su país de origen. La demanda de inmigrantes irregulares recién llegados ya no es tan intensa, pero sí hay una creciente demanda de reagrupación familiar de extranjeros que se legalizaron en años anteriores.
Destaca también el aumento de las demandas de apoyo psicológico por parte de familias, que no se lo pueden pagar, para menores y adultos que sufren depresiones, deterioro de las relaciones familiares o ansiedad.
Cáritas Española presentó ayer la Memoria 2007 de la institución, en la que se detalla el destino de los más de 200 millones de euros invertidos por toda la Confederación Cáritas en sus iniciativas contra la exclusión dentro y fuera de España.
Según el informe, los programas desarrollados por esta ONG el año pasado llegaron a 10.300.000 personas (cerca de un millón dentro de España y 9.300.000 en 44 países del Tercer Mundo). Los mayores esfuerzos presupuestarios se realizaron en los apartados de personas mayores (29,7 millones de euros), de cooperación internacional (26,6 millones), empleo e inserción social (23,5 millones), acogida y atención primaria (20,4 millones) y personas sin hogar (16,5 millones).
La organización humanitaria, que cuenta con 56.000 voluntarios y voluntarias, destaca en su Memoria 2007 que casi el 61% de sus recursos procedieron de donaciones privadas, mientras que el 39% restante tuvo su origen en subvenciones de carácter privado.
Por comunidades, Cataluña encabeza el volumen de fondos invertidos (22,7 millones de euros), seguida de Andalucía (22,5 millones), Madrid (22,1 millones), Castilla y León (20,2 millones) y País Vasco (14,4 millones).
Por su parte, las autonomías donde los recursos de Cáritas tienen un mayor apoyo por parte de los donantes privados son Navarra (casi el 94% de sus recursos proceden de aportaciones privadas), Cantabria (77,8%), Cataluña (72,9%) y Madrid (72,8%).
