Más de un millón de personas continúan desplazadas un año después de las inundaciones en Pakistán

Falta financiación para la mitad de las actividades de recuperación de los medios de vida de la población
Por EROSKI Consumer 8 de agosto de 2011

Entre el 27 de julio y el 7 de agosto de 2010, Pakistán sufrió unas devastadoras inundaciones que dejaron a 20 millones de personas sin hogar y sin recursos. Un año después, «1,3 millones de personas siguen desplazadas y dos millones más tienen ahora que reconstruir sus hogares», recuerda Acción contra el Hambre. La ONG alerta además de que falta financiación para la mitad de actividades de recuperación de los medios de vida de la población.

«Pese a un inicio de año marcado por el llamamiento a las donaciones por parte de Naciones Unidas, el gobierno paquistaní y las ONG, solo se consiguió recaudar el 30% de la financiación necesaria para responder a las necesidades básicas de las 1,3 millones de personas que continúan desplazadas y los dos millones de retornados que tienen que reconstruir sus hogares», explica la organización. Según un informe del Foro Humanitario para Pakistán, formado por ONG de desarrollo, aún no se cuenta con el 50% de los fondos necesarios para las labores de recuperación.

Acción contra el Hambre pudo intervenir con prontitud en la emergencia a través de su base en Thatta, en la región de Sindh, que presentaba el mayor número de afectados al encontrarse en la zona de aluvión del río Indo. «La población que vive en esta rica región cultiva tradicionalmente en las orillas del río, siendo la zona más fértil pero también la vulnerable», indicó Helena Valencia, hoy responsable del pool de emergencia de Acción contra el Hambre pero jefe de base en Sindh hace un año. «El suelo allí no pudo reabsorber tanta agua. Las inundaciones se lo llevaron todo, millones de paquistaníes perdieron sus medios de vida. Los pequeños campesinos, cuyos principales ingresos vienen del jornal, perdieron sus pequeños huertos y ganado lo que les llevó a una situación de dependencia exclusiva de los grandes propietarios de tierras», añadió.

Para hacer frente a la emergencia de hace un año, Acción contra el Hambre implementó proyectos de seguridad alimentaria como cupones de comida, concesiones de microcréditos, distribuciones de semillas y herramientas y programas de dinero por trabajo para ayudar a los pequeños negocios y reactivar la economía local. Por otra parte, los proyectos de agua, saneamiento e higiene ayudaron a la población afectada a recuperar el acceso al agua potable y a mejorar sus condiciones de higiene para evitar la propagación de enfermedades relacionadas con el agua.

Pero la ONG aún necesita fondos para continuar con su ayuda a los damnificados para acceder al agua potable, a través de programas de distribución de agua potable para prevenir la propagación de enfermedades como diarreas y cólera, o para prevenir la desnutrición con la distribución de utensilios básicos.

Sigue a Consumer en Instagram, X, Threads, Facebook, Linkedin o Youtube