Los días de Semana Santa son fechas de marcado carácter vacacional y de ocio. Establecimientos turísticos, grandes mayoristas y agencias de viaje lo saben y, por ello, desde hace meses ya tienen preparadas sus ofertas especiales.
Han seleccionado con cuidado destinos interesantes, paquetes de corta estancia, tentadores combinados de billetes de avión + hotel… Es temporada alta por excelencia, tanto es así que algunos portales de viajes promocionan ahorros de hasta el 40% por venta anticipada al reservar sus propuestas.
Para organizar un viaje de Jueves Santo a Pascua hay que consultar lo primero el calendario. Como este año cae a mediados de abril, los amantes de la nieve saben que es posible que las principales estaciones de esquí tal vez ya no estén en muy buen estado. Esto también significa que estarán menos concurridas. Quizá merezca la pena disfrutar entonces de las pistas de nieve artificial mejor acondicionadas.
La primavera suele ser irregular. Conviene ser previsores respecto al clima, pero puede que incluso sea posible iniciar la temporada de playa.
Si se opta por esquiar, lo más recomendable es evaluar las diferentes ofertas de viajes en varias agencias. Hay instalaciones muy apetecibles no solamente en España, también en Andorra, Francia, Suiza…
Tanto si el destino es la montaña como si no, hay que comenzar a buscar. Indagando en sitios web y agencias, y prestando atención a la publicidad nos encontraremos con otros muchos viajes económicos. Algunos de ellos llamativamente baratos. También es habitual que diversas asociaciones preparen salidas durante estas fechas en las que puede inscribirse cualquiera, como la de 10 días que organiza a Egipto la Asociación Andaluza de Egiptología.
Antes de tomar una decisión precipitada hay que preguntarse si de veras da tiempo en tan pocos días de visitar y deleitarse desplazándose a algunos lugares. Hay que tener presente que frecuentemente los aviones llegan después de mediodía, de modo que en realidad los tres días sugeridos en realidad son 3 noches de alojamiento. Acaso compense alargar o adelantar un poco las vacaciones y efectuar la visita con mejores garantías.
De no ser así, evidentemente las alternativas más operativas tendrán que ver con la proximidad o las buenas comunicaciones a un destino abarcable en ese tiempo. Calibrar los recorridos de las distancias es importante. Se deberán prever los traslados desde y hasta el aeropuerto.
Por ello, ciudades europeas como París, Roma, Praga o Lisboa, donde siempre es una delicia recorrer sus calles, visitar sus museos y pasear por su historia, y destinos cálidos como las Islas Canarias, sin olvidar lugares como Sevilla o Valladolid, en los que la Semana Santa es un hito, constituyen una escapada ideal para estas fechas.
