El precio de la vivienda subirá a un ritmo notable en 2004 aunque en menor medida que el pasado año. Así lo explicó ayer el decano del Colegio de Registradores de España, Fernando Méndez, que adelantó que según los datos de este colectivo el repunte interanual rondará el 15%, lo que supone «una ligera desaceleración respecto a 2003».
Méndez presentó los resultados de la primera estadística registral inmobiliaria de la que se desprende que los pisos se encarecieron un 7,98% en el primer semestre. Este dato es inferior al 9,02% en que, con datos de las tasadoras, cifró la subida la pasada semana el Ministerio de Vivienda. Entre enero y junio, las comunidades más inflacionistas fueron las de Murcia, Aragón, Cataluña y Castilla-La Mancha. En el extremo opuesto se situaron Galicia, Baleares, Canarias y Cantabria.
A pesar del repunte del primer semestre (7,98%), que fue más intenso en los pisos de segunda mano que en los nuevos, los registradores son moderadamente optimistas respecto al conjunto del año y prevén que la tendencia se mantenga en lo que queda de 2004, para cerrar el ejercicio con un repunte interanual de entre el 14% y el 15%. Según los datos del estudio, entre julio de 2003 y junio de este año los pisos se encarecieron un 18,8%, dato que si se compara con el 7,98% del primer semestre «hace pensar que 2004 terminará con una ligera desaceleración del entorno del 2,8%», aseguró Méndez.
La estadística de los registradores revela que el precio medio de las casas en el segundo trimestre se situó en 1.482,34 euros por metro cuadrado. En el caso de los pisos nuevos esta media alcanzó los 1.581 euros, por encima de los 1.06,37 euros de las fincas de segunda mano.
Por comunidades autónomas, Madrid presentó los precios más caros: 2.503,36 euros de media, 2.541,66 euros en las casas nuevas y 2.487,84 en las usadas. Tras ella, el País Vasco, con 2.323,24 euros, 2.348,71 euros y 2.298,36 euros, respectivamente. La más barata resultó Extremadura: 611,28 euros, 712,77 euros y 551,89 euros.
