El precio medio de la vivienda usada acumula un descenso del 34,61% desde mediados de 2007

El metro cuadrado de los pisos de segunda mano se sitúa en 2.490 euros, por lo que cae a niveles de comienzos de 2005
Por EROSKI Consumer 26 de octubre de 2009

Desde que en el segundo semestre de 2007 concluyó el «boom» que registraba el sector inmobiliario hasta la actualidad, el precio medio de la vivienda de segunda mano acumula un descenso del 34,61%, según un informe elaborado por Tecnocasa y la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona. El precio del metro cuadrado de los pisos usados se situó en 2.490 euros por metro cuadrado a cierre de la primera mitad del año, en niveles del primer semestre de 2005.

El estudio calcula que el importe de compraventa medio de los pisos de segunda mano se ha abaratado sólo en la primera mitad de este año un 17,74%, porcentaje superior al 13,83% registrado al cierre del primer semestre de 2008. Este desplome de los pisos usados en estos dos últimos años contrasta con la subida del 42,8% que acumularon entre el primer semestre de 2005 hasta la primera mitad de 2007.

Las cuatro ciudades con la vivienda usada más cara son Barcelona, donde el metro cuadrado de pisos usados se cotiza a 3.226 euros, por delante de Bilbao (2.866 euros), Madrid (2.728 euros) y L’Hospitalet de Llobregat (2.370 euros), tal como se refleja en este trabajo. El perfil de vivienda media usada que se vende en España es un piso de unos 68 metros cuadrados, con tres habitaciones, situada en un tercer piso de un inmueble de unos 38 años de antigüedad.

La media de días transcurridos desde que una vivienda se puso en el mercado hasta su venta ha disminuido en la primera mitad del año en alrededor de un mes (35 días), con lo que en la actualidad se sitúa en unos 100 días, según el informe. Tecnocasa indica que del total de viviendas vendidas por las oficinas de la empresa en el primer semestre del año, más de la mitad (el 57%) no tardaron más de tres meses en encontrar comprador.

El perfil del comprador medio en España entre los pasados meses de enero y junio corresponde a un joven de entre 25 y 35 años de edad, con estudios secundarios, contrato indefinido, soltero, de nacionalidad española y una renta mensual neta inferior a 1.500 euros. Se trata de la primera vez, a diferencia de informes anteriores, que un potencial comprador de vivienda lo hace a título individual, sin apoyo de otra persona, subraya la empresa.

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