Con motivo de la celebración de la feria Construmat en Barcelona, los responsables del polémico proyecto de «minipisos» han defendido su propuesta y han manifestado que todo el debate surgido se ha simplificado al tema de los metros cuadrados, dejando al margen otros factores tan importantes como el problema de acceso a la vivienda. En su opinión, toda esta polémica suscitada ha reemplazado la discusión que se quería poner sobre la mesa.
El proyecto de este grupo de arquitectos, bautizado como APTM, tiene como objetivo investigar y potenciar la construcción de viviendas asequibles y adaptables a las nuevas necesidades sociales.
Además, los defensores de la idea de pisos de superficies muy reducidas han apuntado que su iniciativa es una realidad en el mercado, ya que la tendencia está experimentando un incremento de las casas con un número de metros cuadrados menor pero mejor diseñadas. También han subrayado que este proyecto no plantea ninguna novedad en España. De hecho, según datos del último censo recogidos por Servimedia, un total de 6.790 familias formadas por cuatro o más personas viven en España en casas de menos de 30 metros cuadrados. Más de la mitad de esas familias residen en las regiones de Madrid y Andalucía. Además, el censo revela que en España hay de 76 viviendas de menos de 30 metros en las que viven más de 10 personas, la mayoría en Madrid.
Por su parte, y tras la polémica generada, la ministra de Vivienda, María Antonia Trujillo, en declaraciones a la Cadena Ser, ha reconocido que este innovador modelo de vivienda «tiene éxito en distintos países de la UE y que en España, por nuestra cultura, podría no cuajar». Sin embargo, Trujillo ha matizado que esta serie de soluciones arquitectónicas es una propuesta, presentada por un grupo de arquitectos en la feria Construmat, que se va a debatir y cuya inclusión no está prevista en las diversas políticas de vivienda.