Saltar el menú de navegación e ir al contenido
Canales de EROSKI CONSUMER
Secciones dentro de este canal: Alimentación
Estás en la siguiente localización: Portada > Alimentación > Guía de los alimentos > Legumbres y tubérculos
Las legumbres tienen propiedades nutricionales muy interesantes y son saludables, versátiles y económicas
Alubias, garbanzos, lentejas, judías... Las legumbres son estupendas embajadoras de la salud. Incluirlas en la dieta, entre dos y cuatro veces por semana, tiene varios efectos beneficiosos para el organismo. En el marco de una dieta pobre en grasas, ayudan a mantener bajos los niveles de colesterol. Por su destacado contenido en fibra, combaten el estreñimiento y favorecen la salud intestinal. Son económicas, dan mucho juego en la cocina y están recomendadas para los diabéticos, ya que tienen un índice glucémico pequeño. A continuación se reseñan sus principales características nutricionales y se dan trucos para prepararlas.
Cocidos o guisos, pucheros o sopas. El invierno invita a comer platos de cuchara donde las legumbres son protagonistas, aunque también tienen cabida en otras preparaciones más ligeras, como ensaladas o cremas. Pese a que son las estrellas de los días fríos, pueden disfrutarse en cualquier momento del año gracias a su versatilidad. Las siguientes son algunas de las más utilizadas.
Quedan muy bien en cocidos y ensaladas. Si no son frescas, necesitan remojo en agua fría. Su cocción dura de dos a tres horas en cazuela normal, y una hora, si se cocinan en olla rápida. Una manera de darle un "toque" personal al plato es añadir un refrito de cebolla y pimentón.
Se cuecen rápido. Bastan cinco minutos en agua hirviendo con sal. Es importante que se refresquen a continuación en agua fría con hielo para fijar el color. Para servirlos, basta combinarlos con un salteado de ajo y jamón o bacón, aunque los guisantes y las habas son unas legumbres muy apropiadas para hacer cremas. Para ello conviene pasarlos por el chino con el fin de eliminar la piel, que puede resultar indigesta.
Se pueden servir cocidos con la sopa o un caldo, cocidos y servidos de manera independiente, o en ensaladas. No obstante, los garbanzos también admiten guarniciones contundentes, como carnes y pescados (en especial, el bacalao).
Los platos más sabrosos son los elaborados a partir de judías frescas, en purés, en ensaladas y al ajillo. Conviene no cocerlas demasiado, si se tiene la intención de comerlas rehogadas tan solo con un poco de aceite de oliva.
Esta legumbre no necesita remojo, y en una cazuela normal basta con dos horas de cocción para que resulten sabrosas. Además de cocidas con un poco de cebolla y pimiento verde, se pueden comer con chipirones. El resultado es un plato muy sabroso y saludable desde el punto de vista nutricional. También se recomienda su ingesta salteadas con verduras para elaborar ensaladas templadas.
Presente en muchas ensaladas y platos orientales, la soja es muy recomendable también para preparar potajes. No necesita remojo y cualquier preparado válido para las lentejas es aplicable a la soja.
RSS sobre legumbres
Al publicar un comentario aceptas la política de protección de datos
Los comentarios de EROSKI CONSUMER están moderados para asegurar un diálogo constructivo entre los usuarios, por lo que no aparecerán inmediatamente.
Aquí explicamos qué criterio seguimos para publicar comentarios. Aquellos usuarios que no sigan estas normas de cordialidad no verán sus opiniones en nuestra web:
Eroski Consumer no se hace responsable de las opiniones vertidas por los usuarios.
Eroski Consumer es un producto informativo de Fundación Eroski. Cualquier comentario sobre la marca Eroski debe dirigirse a la Atención al Cliente de Eroski.
En EROSKI CONSUMER nos tomamos muy en serio la privacidad de tus datos, aviso legal. © Fundación EROSKI