Comer y beber de forma moderada es la clave para evitar muchos de los problemas de salud que se registran en estos días de celebraciones, según la Sociedad Navarra de Medicina de Familia y Atención Primaria, que ha lanzado una serie de consejos dietéticos que «disminuyen el riesgo de enfermar y ayudan a no perder la sensación de bienestar».
«La moderación debe ser la conducta a seguir cuando nos sentemos a la mesa, procurando además mantener un horario para las comidas principales», afirma la Sociedad Navarra. Otras recomendaciones son que en todas las comidas se incluya una ración de verduras o frutas, tardar al menos dos horas en acostarse si la comida ha sido copiosa, y no ingerir alimentos muy grasos ni fritos en caso de padecer acidez, reflujo u otros problemas de estómago.
Los especialistas destacan también lo beneficioso de masticar despacio, de incluir en todas las comidas ensaladas y bebidas sin alcohol, y no olvidar que los refrescos y bebidas azucaradas tienen muchas calorías. Aconsejan asimismo realizar ejercicio físico adaptado a las condiciones personales al menos cuatro días a la semana durante 40 minutos y si se piensa hacer alguna dieta, que sea recomendada por un profesional.
Respecto al tipo de alimentos, los pescados «son todos recomendables» por su contenido en proteínas y su baja aportación de grasas. En carnes, señalan como más adecuadas las de ave y los trozos magros.
Sugieren además que los lácteos se consuman desnatados y el pan y los cereales de tipo integral, que se limite la ingesta de bollería, pastelería y repostería, y que para preparar los alimentos se opte por la plancha, la parrilla, el horno o por hervirlos.
Respecto al alcohol, los expertos recuerdan que es uno de los problemas para la salud más frecuentes en estas fechas. Por ello, recomiendan tener en cuenta el grado de tolerancia de cada uno, alternar bebidas alcohólicas con agua, evitar aquellas que tengan alta graduación y no conducir en caso de haber bebido.
