Un estudio realizado por científicos de la Sahlgrenska Academy en la Universidad de Gotemburgo (Suecia) ha concluido que los niños que beben leche entera todos los días tienen un índice de masa corporal (IMC) menor que los que la toman sólo en ocasiones. Los pequeños que se alimentan con leche entera a diario pesan así una media de cuatro kilogramos menos.
También han hallado diferencias entre los niños con sobrepeso que consumían leche entera a diario y aquellos otros que no, ya que los menores que toman de forma habitual leche con una cantidad de grasa del 3% tienen menos sobrepeso. Entre las posibles respuestas a estos datos, los investigadores señalaron que puede que los niños que beben leche entera a diario tengan un IMC más bajo porque beben menos refrescos o porque comen otros alimentos que afectan a su peso.
Los autores observaron, además, que el 62% tenía niveles bajos de vitamina D en su sangre, por debajo de la cifra mínima, es decir, menores de entre 75 y 100 nanomoles por litro. En este sentido, indicaron que no se podría determinar el motivo por el que se relaciona esto con el consumo de pescado, pero matizaron que aquellos niños que comían pescado con más grasa, como el salmón, al menos una vez a la semana tenían mayores niveles de ácidos grasos EPA y DHA en su sangre. Los científicos subrayaron así la importancia de comer pescado fresco en lugar del procesado.
La investigación analizó la nutrición, la composición del cuerpo y la mineralización de los huesos de 120 niños sanos de ocho años de edad, que relataron lo que habían comido el día anterior y contestaron preguntas acerca de la frecuencia con la que consumían ciertos alimentos.