Por qué los globos pueden ser peligrosos para los niños, niñas, adolescentes y el medio ambiente

Con vigilancia activa por parte de los adultos y ciertos cuidados para desecharlos de modo correcto, los globos pueden ser un juguete seguro para los peques
Por María Huidobro González 23 de junio de 2025
globos menores
Imagen: Hasan Albari
Entre los juguetes que no faltan en toda celebración infantil (cumpleaños, fiesta de pijamas…) —y no tan infantil—, hay unos muy divertidos y coloridos, pero que, si no tenemos cuidado, suponen un verdadero peligro no solo para los niños y niñas más pequeños. Los globos pueden causar asfixia en los menores y explosiones en el metro, ser un indicio de consumo de drogas en adolescentes e, incluso, contaminar el medio ambiente. Por esta última razón precisamente, pronto estará prohibido soltarlos al aire. En las siguientes líneas ahondamos en los motivos por los que los globos son un riesgo para todos, pero especialmente para los peques, y qué podemos hacer al respecto.

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Provocan asfixia o atragantamiento en los menores

Da igual que sean solo de adorno o formen parte de un refrescante juego de agua, o que estén inflados, sin inflar o ya rotos porque han explotado. Los globos de látex son un peligro para los niños y niñas.

Los globos sin hinchar o rotos pueden causar ahogo o asfixia en los menores de ocho años. Y es que si son aspirados al inflarlos o al jugar con ellos en la boca (morder, chupar…), “se adhieren y toman la forma de las vías respiratorias pudiendo provocar una obstrucción completa (el 29 % de las muertes por aspiración de cuerpo extraño no alimentario lo son por globos), algo que también puede ocurrir con los guantes de látex”, comenta el Comité de Seguridad y Prevención de Lesiones No Intencionadas en la Infancia de la Asociación Española de Pediatría (AEP) en sus recomendaciones.

Y en el caso de los más peques, que se llevan todo a la boca, el riesgo también está en los globos hinchados: si los muerden y se asustan tras explotarlos, puede que aspiren sus fragmentos.

🎈 Globos de helio

A los peques les encantan los globos de helio, porque flotan y tienen formas divertidas e imágenes de sus personajes favoritos. Y, además, a los niños más mayores y adolescentes les hace gracia que al absorber con la respiración el gas que los llena se consiga momentáneamente una voz más aguda y chillona (como la voz de un pitufo).

Pero también estos globos tienen peligro. Al inhalar helio en grandes cantidades o hacerlo muy rápido, hay riesgo de asfixia y daños cerebrales: los pulmones dejan de recibir oxígeno y, además, se paraliza el reflejo respiratorio, que solo se activa ante la presencia de dióxido de carbono. De ahí que pueda producir síncope, traumatismo craneoencefálico no conmocional, mareos/aturdimiento, contusión/abrasión y conmociones cerebrales, como apunta este estudio estadounidense. En casos extremos podría ser letal.  

Producen un miedo infantil

Si bien la mayoría de los menores disfrutan con la presencia de globos, también hay quienes no quieren ni verlos, y menos que exploten cerca. Entre los miedos infantiles más comunes está el temor a los ruidos fuertes e inesperados. Y el que produce un globo al romperse es uno de esos. De ahí que muchos peques tengan pánico a los globos, por experiencia negativas con ellos (le ha explotado uno en la cara, por ejemplo).

globos peligro niños
Imagen: Allan Mas

Los niños con globofobia tienen un miedo irracional a los globos, un temor que no pueden controlar y que les puede generar mucha ansiedad. Esta fobia les puede llevar a evitar fiestas o lugares donde los globos estén presentes, lo que, en estos casos, le puede afectar a su vida social y personal.

Son necesarios para una droga de moda

¿Conoces el gas de la risa? Este gas (óxido nitroso) se utiliza como analgésico y anestésico quirúrgico para reducir el dolor y la ansiedad durante el parto, el tratamiento de urgencia de lesiones y los procedimientos dentales. También es un aditivo alimentario y se usa como combustible. Hasta ahí todo bien.

Pero también preocupa que siga siendo una droga de moda barata y muy popular entre los jóvenes, cuyo consumo se realiza mediante la inhalación del gas contenido en wippets (cartuchos metálicos cilíndricos) y globos que se utilizan como reservorio de las dosis, de manera que llega al cerebro a través de las vías respiratorias.

🎈 Efectos y secuelas

Sus efectos aparecen en menos de un minuto y también desparecen rápido (en 15-45 minutos). Así provoca alucinaciones, vocalización incontrolada, alteraciones de la percepción, desorientación espacial y temporal o reducir la sensibilidad al dolor. Pero también hay secuelas graves, como explican desde la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas de España:

  • Hipoxia (asfixia) producida al retener demasiado tiempo el gas en los pulmones, ya que desplaza el oxígeno y disminuye su entrada al cerebro, lo que puede implicar desde desmayos hasta paradas respiratorias.
  • Quemaduras en la boca y la parte superior del tracto respiratorio.
  • Náuseas y vómitos.
  • El consumo continuado puede dañar la médula espinal y llegar a provocar la muerte.
  • Si se utiliza durante varios días seguidos o de manera intensa, bajan los niveles de la vitamina B12 en el organismo, que tendría como consecuencia la aparición de problemas neurológicos y cognitivos.

Dañan las instalaciones eléctricas

Los globos metalizados o metálicos (conocidos también como foil o globos de poliamida) son preciosos y aguantan varios días flotando con el helio. Sin embargo, no son biodegradables y resultan muy peligrosos para peques y mayores porque contienen metal, que es transmisor de la electricidad, así que tienen la capacidad de provocar explosiones y causar apagones cuando entran en contacto con las redes eléctricas.

Por eso destaca la prohibición de acceso con este tipo de globos a las redes de metro, como la de Madrid, “ante el riesgo de que estos elementos provoquen incidencias eléctricas que afecten a la circulación de los trenes”.

Contaminan playas, mares y ríos

globo cielo
Imagen: Sirirak Boonruangjak

Normalmente, los globos son de un solo uso, aunque puedes reutilizarlos para envolver regalos, hacer pulseras o rellenarlos con harina y convertirlos en un muñeco, entre otras manualidades.

Y muchos de estos globos se sueltan al aire durante eventos y acaban en el mar o en la tierra a varios kilómetros de distancia, con un impacto considerable para el agua, el suelo y su biodiversidad. De hecho, este residuo está entre los diez artículos de plástico de un solo uso con más presencia en las playas de la Unión Europea.

Por eso, el Ministerio para la Transición Ecológica planea prohibir la acción deliberada de soltar o liberar globos al aire en eventos o celebraciones, tanto los fabricados con polímeros sintéticos, como láminas de nailon recubiertas de aluminio, o naturales modificados químicamente, como el látex.

Así figura en el borrador del proyecto de real decreto con el que también se tiene la intención de prohibir el desecho de toallitas húmedas a través del inodoro para reducir su impacto en las infraestructuras de saneamiento y el medio ambiente, como ya se ha hecho con otros productos de plástico de un solo uso (pajitas, platos, cubiertos…).

Recomendaciones para un uso seguro de globos

Una vez visto que el empleo de globos en la infancia y adolescencia puede resultar peligroso, y que este juguete infantil puede causar daños en nuestras infraestructuras eléctricas y espacios naturales, ¿qué hacer? ¿No dejo que mi hijo juegue con globos? Estos son algunos de los consejos para evitar riesgos.

  • No permitas que los niños y niñas pequeños inflen globos ni que jueguen con ellos sin la supervisión de un adulto, como advierte la normativa europea sobre la seguridad de los juguetes.
  • Por seguridad, procurad hincharlos siempre con un inflador de globos.
  • Recoge inmediatamente todas las piezas de globos rotos y deséchalas fuera del alcance de los menores.
  • Desínflalos y córtalos antes de tirarlos para evitar que se enreden o floten.
  • En las fiestas, es preferible optar por alternativas decorativas más seguras y que no den miedo, como guirnaldas, banderines o pompones de papel.
  • Atento por si tus hijos adolescentes tienen globos. Háblales de los riesgos del óxido nitroso.
  • Conviene usar globos biodegradables (100 % látex) que pueden desecharse en compost o en el contenedor de residuos orgánicos.
  • Si utilizas globos de otro material, intenta reutilizarlos en manualidades o decoración. Si no, pregunta en tu Punto Limpio más cercano qué empresas pueden darle un segundo uso y de qué manera se los puedes hacer llegar.
  • No sueltes globos al aire.
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