Si en la escalera de su vivienda hay una ventana con repisa interior que quede a la altura de la escalera, puede decorarla alicatándola del mismo modo que la escalera. De esta forma, conseguirá combinar la decoración de ambas zonas, conjunción que podrá acrecentar si pinta del mismo color las barandillas y la ventana, si ambas son de madera.
Si la ventana carece de repisa puede colocarle una consultando el presente enlace https://www.consumer.es/web/es/bricolaje/carpinteria/2005/12/26/148070.php
Las repisas interiores son el lugar ideal para ubicar plantas de interior que necesiten recibir los rayos solares, bajando las persianas podremos protegerlas fácilmente para evitar el efecto lupa de los mismos, por lo que será sencillo evitar sus efectos nocivos.
Disponer de una repisa embaldosada es más ventajoso, sobre todo si vamos a colocar alguna planta, debido a que el agua del riego o de la lluvia puede deteriorar la madera si está en contacto continuo con ésta.
Si la ventana tenía una antigua repisa deberá de retirarla y tratar la madera para comprobar que no está podrida. Si lo ésta, podrá reparar las zonas deterioradas, tras retirarlas y lijarlas, con pasta de madera o serrín y cola de carpintero, o bien poner una nueva. Será necesario que compruebe también la presencia de parásitos de la madera y la trate si han sido atacados por ellos, aunque en este caso sería más recomendable sustituirla debido a que se trata de una pieza pequeña de este material.