Cuando un aficionado a la jardinería determina el proyecto de jardín que va a llevar a cabo en su terreno tiende a planificar espacios muy ambiciosos con multitud de especies, muchas de las cuales son exóticas, y también a introducir una cantidad exagerada de elementos ornamentales sin vida, que suelen recargar todo el terreno.
Estos, sin duda, son los mayores y más habituales errores que acostumbran a cometer las personas no profesionales. A continuación se enumeran una serie de recomendaciones, que además suponen un ahorro económico para quienes se encuentren en la fase de planificación del jardín:
–Antes que nada, debe tener en cuenta que un jardín mejora con los años y que hasta que no haya transcurrido una década dicho espacio no habrá madurado convenientemente, así que no tenga prisa.
–Lo primero que debe hacer es observar atentamente el entorno para procurar que su jardín se integre dentro de la naturaleza autóctona. Dentro de este estudio también se incluye analizar el clima y el terreno.
–En su plan previo evite introducir mucha cantidad y variedad de plantas, porque además de trabajo supone un desembolso económico importante.
Teniendo en cuenta estas premisas, ya pueda comenzar a realizar su proyecto con ciertas garantías.
