A partir del 1 de septiembre se comercializará en España un nuevo seguro, denominado genéricamente seguro del título de propiedad. «Es un seguro que garantiza la voluntad de los adquirientes de una vivienda en los términos establecidos en la escritura de compraventa. Por tanto, cualquier tipo de estafa anterior o posterior a esa compra o cualquier tipo de problema legal asociado a la compraventa queda cubierto por el seguro. A cambio, la aseguradora se subroga en las acciones legales a emprender por el asegurado contra los causantes del perjuicio», explica Gonzalo Fernández de Mesa, director general de L and E, compañía que comercializará el seguro en España.
Un posible caso sería el de las viviendas en construcción. El nuevo seguro garantiza a los compradores que la casa tendrá los metros cuadrados destinados a vivienda y zonas de recreo, entre otras estipulaciones. Distinta es la adquisición de viviendas de segunda mano. En este caso, el seguro va destinado a proteger al comprador frente a posibles fraudes en la compraventa.
La garantía del seguro es alternativa: ante la aparición de un problema, el seguro devuelve el dinero desembolsado por la compraventa de la casa; o bien, si el cliente no quiere la devolución del dinero (porque, a pesar de que no se ajuste a la escritura, le interesa la casa) el seguro le indemniza según los términos de la póliza. El seguro se basa en el tradicional principio de solidaridad: entre muchos pagan los siniestros de unos cuantos. De este modo es posible que las primas tengan un precio asequible.
Aunque cuenta con una larga tradición, el seguro cobro importancia en Estados Unidos en los años 80, alcanzando unas cuotas de mercado del 97% entre los compradores de viviendas. De América saltó a Inglaterra y Francia, y a partir de septiembre fechas se comercializará en España, a través de la firma de seguros Génesis, que suscribirá todo el negocio de mercado que no está obligatoriamente mediado por entidades aseguradoras dependientes de un solo banco. En cuanto al coste del seguro, Gonzalo Fernández de Mesa comenta que «su precio es muy competitivo: 30.000 pesetas en un pago único. En España hay, que se sepa, un millón de transacciones de compraventa al año.
