Ley antispam: las llamadas comerciales ahora están prohibidas

La reforma de la Ley General de Telecomunicaciones, publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el 29 de junio de 2022, introdujo un artículo, el número 66.1, que prohíbe las llamadas comerciales, también conocidas como publicitarias o spam. Un año más tarde, este artículo ha entrado en vigor.

Según lo definido en la Ley 11/2022, se establece el derecho «a no recibir llamadas no deseadas con fines de comunicación comercial, salvo que exista consentimiento previo del propio usuario para recibir este tipo de comunicaciones comerciales, o salvo que la comunicación pueda ampararse en otra base de legitimación de las previstas en el artículo 6.1 del Reglamento (UE) 2016/679 de tratamiento de datos personales».

En otras palabras, esta norma tiene como objetivo poner fin a las llamadas comerciales, sin importar si provienen de un teleoperador o de cualquier otro tipo de comercio.

La responsabilidad de garantizar el cumplimiento de esta ley recae en la Agencia Española de Protección de Datos. Cuando detecte o reciba una denuncia sobre llamadas comerciales no autorizadas, tomará medidas y se dirigirá a la empresa en cuestión para iniciar un procedimiento sancionador.

Las compañías que violen esta normativa están sujetas a multas que oscilan entre los 100.000 euros, en casos considerados leves, y los 20 millones de euros, en situaciones calificadas como faltas muy graves.

De acuerdo con la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones, la ley se aplica a los teléfonos con numeración fija o móvil asignada en España.

No obstante, si una empresa realiza llamadas comerciales fuera de España, la AEPD también tiene la autoridad para tomar medidas contra dicha empresa. La Agencia Española de Protección de Datos posee la facultad sancionadora en materia de protección de datos y puede imponer sanciones a empresas extranjeras en caso de incumplimiento.

Existen dos excepciones que permiten a las empresas realizar llamadas comerciales: cuando se haya otorgado una autorización expresa y previa para recibir dichas comunicaciones o cuando se considere que dichas llamadas son indispensables para proteger los intereses vitales del ciudadano o llevar a cabo actividades con fines de interés público.

La normativa prohíbe recibir llamadas sin consentimiento previo, pero, en la práctica, las empresas emplean diversas estrategias para obtener esta autorización. Por ejemplo, al comprar un producto o participar en una promoción, es común que compartamos nuestros datos con esa compañía, e incluso con terceros, sin prestar mucha atención a los detalles. No leer las condiciones puede dar lugar a recibir llamadas comerciales en el futuro.

No obstante, la Agencia Española de Protección de Datos indica que la obtención de este consentimiento debe cumplir con el Reglamento 2016/679. Esto significa que se requiere un «acto afirmativo claro que refleje una manifestación de voluntad libre, específica, informada e inequívoca».

En cualquier caso, aun habiendo aceptado recibir estas llamadas, deben mantenerse los horarios permitidos para realizarlas. Según la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios, estas comunicaciones solo pueden realizarse de lunes a viernes, desde las 9:00 hasta las 21:00 horas, excluyendo los días festivos.

Cuando una empresa argumenta un «interés legítimo» para realizar llamadas, implica que ha llevado a cabo un análisis previo para determinar si realizar ese contacto prevalece sobre los posibles perjuicios para el destinatario de la llamada. En otras palabras, la decisión de llamar o no recae en la responsabilidad de la compañía.

Ejemplos de este tipo de llamadas son las encuestas realizadas por el Instituto Nacional de Estadística (INE), las campañas de sensibilización u otras llamadas relacionadas con investigaciones públicas.

Por supuesto, las empresas aún emplean diversas estrategias para realizar estas llamadas no deseadas. Incluso a algunas les renta arriesgarse al pago de multas con tal de seguir contactando con posibles clientes. 

Para evitar seguir recibiendo estas molestas comunicaciones, existen diferentes métodos que puedes implementar para filtrarlas. Además, siempre está la opción de activar la función de identificación de llamadas en el teléfono o marcar ciertos números como spam para evitar recibir sus comunicaciones nuevamente.

La opción más recomendable es activar el filtro de Google, ya que permite identificar la mayoría de estas llamadas antes de contestar. Además, en caso de detectar que puedan ser fraudulentas, el filtro las bloqueará de forma automática.

• Abre la aplicación «Teléfono» en el dispositivo.
• Toca «Más opciones» en el icono de los tres puntos verticales > «Ajustes» > «Filtro de llamadas y de spam».
• Activa o desactiva «Ver identificador de llamada y de spam».
• De manera opcional, para bloquear las llamadas de spam en el teléfono activa «Filtrar llamadas de spam». No recibirás notificaciones de llamadas perdidas ni de mensajes de voz, pero las llamadas filtradas aparecerán en tu historial de llamadas.

Puedes usar la opción «Silenciar números desconocidos» (operativa para iOS 13 o versiones posteriores) o una aplicación de terceros para bloquear las llamadas no deseadas. Ten en cuenta que esto bloquea tanto spam como otras llamadas que no sean comerciales, excepto si has intercambiado algún SMS previo o has recibido un correo electrónico con el número de teléfono. 

• Para activar «Silenciar número desconocidos», ve a «Ajustes» > «Teléfono», luego desplázate hacia abajo y activa el botón «Silenciar números desconocidos». Las llamadas de números desconocidos se silenciarán, se enviarán al buzón de voz y se mostrarán en tu lista de llamadas recientes.

• Para configurar una aplicación para filtrar y detectar llamadas no deseadas, ve a Apple Store y descarga una app que detecte y bloquee las llamadas telefónicas no deseadas. Ve a «Ajustes» > «Teléfono». Pulsa «Bloqueo e identificación de llamadas». En «Permitir» puedes hacer que estas apps bloqueen las llamadas y proporcionen el ID de quien llama, activar o desactivar la app.