Algunas compañías gasistas y eléctricas, en concreto, Gas Natural y Endesa, podrían haber desarrollado prácticas «abusivas» para captar clientes de forma «poco ética» o «fraudulenta», según informó ayer la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), que ha recibido en los últimos días numerosas consultas y quejas de ciudadanos.
Hay dos tipos de denuncias. Por un lado, las referidas a operarios acreditados que aprovechan la revisión de las instalaciones de gas de los domicilios particulares para tratar de conseguir clientes y, por otro, las que se refieren a llamadas telefónicas en las que se ofrecen descuentos en las tarifas energéticas cuya aceptación suponen un cambio de contrato. En el primer caso los usuarios afectados aseguran que firmaron unos documentos, a instancias de operarios de Gas Natural que se personaron en su domicilio, haciendo constar que la revisión de las instalaciones estaba realizada. Según OCU, lo que no explican los representantes de la empresa gasista es que esta documentación incluye una autorización para que Gas Natural tramite la baja con la compañía eléctrica que el usuario tiene para que pase a ser cliente de la empresa que preside Antoni Brufau. En varios casos, añade la organización, «se da el agravante de que la firma no es la del titular del contrato».
La segunda actuación denunciada ante OCU es la practicada por Endesa que, tras recibir respuesta afirmativa de los usuarios para acceder a descuentos en su tarifa eléctrica, pasa a tramitar el cambio de empresa con la comercializadora de Endesa sin la firma necesaria del consumidor.
Ante estas actuaciones de las compañías energéticas, OCU advierte de que cambios contractuales como los denunciados suponen, de hecho, el paso de los consumidores afectados al mercado liberalizado de la energía, «lo que implica en la mayoría de los casos que quedan sujetos a contratos con cláusulas que pueden ser perjudiciales».
Para la organización, estas prácticas «suponen un engaño para el usuario y recuerdan a la lamentable manera de captación de algunas compañías de telefonía que ya han sido denunciadas». Por todo ello, OCU avanzó que pondrá en conocimiento de las autoridades competentes estos hechos para evitar que se repitan en España casos como del Reino Unido, donde el regulador energético Energywatch recibió un 20% de reclamaciones por prácticas similares.
Asimismo, recordó que la organización ya denunció hace unos meses que la liberalización eléctrica y del gas era «un fracaso», dada la ausencia de competidores reales. «Pero OCU no se podía imaginar que la escasez de ofertas interesantes para los usuarios pudiera suplirse por unas conductas fraudulentas por parte de las compañías para obtener un puñado de nuevos clientes», concluye el comunicado.