Recientemente se hacía público un estudio elaborado por la consultora Samsung Business Communications sobre el auge del teletrabajo en España. Sus datos venían a confirmar la tendencia que en los últimos años se está dando en el mercado laboral nacional e internacional, cada vez son más las empresas que fomentan el trabajo a distancia entre sus plantillas de empleados.
Así, según este estudio, el 53 por ciento de las empresas españolas ofrece a sus trabajadores la opción de desempeñar su labor cotidiana desde sus hogares. Pese a estos datos el informe concluye que el porcentaje de teletrabajadores es aun muy inferior en España al de otros países de nuestro entorno, como Suecia o los Países Bajos.
Sin embargo, más allá de la anécdota de los datos concretos es cierto que cada vez hay más empleados que desempeñan sus trabajos desde casa. Esta opción conlleva ventajas e inconvenientes tanto para la empresa como para el trabajador. A continuación vamos a detallar las más significativas:
Ventajas
-El teletrabajo permite al empleado pasar más tiempo en su casa, con lo que su vida familiar se enriquece. Esto es así sobre todo en el caso de tener hijos pequeños, trabajar desde su hogar permite al trabajador estar más cerca de los niños.
-Además posibilita un ahorro de dinero, ya que el trabajador no tiene que desembolsar cada mes los consabidos gastos de desplazamiento. No tener que acudir presencialmente al lugar de trabajo también permite ahorrar tiempo. En la mayoría de las ocasiones la empresa sufraga también los gastos derivados del trabajo en el hogar, es decir, la conexión a Internet o el precio de los posibles envíos postales.
-El empleado puede organizar más libremente su horario y adecuarlo a sus necesidades.
Inconvenientes
-Trabajar desde casa puede suponer una pérdida de contacto con el entorno laboral. Esto a veces deriva en una bajada de la productividad, lo que es el mayor reparo de las empresas.
-El tiempo de trabajo puede aumentarse si el empleado no se organiza bien su tiempo. Lo mejor es fijarse una jornada laboral que comprenda determinadas horas al día para así evitar que el trabajo afecte demasiado a nuestra vida personal.
