Imagen: Daniel Lobo
Elegante, sofisticado y con un toque único de distinción. El chaqué sigue siendo la prenda estrella de la galantería para los hombres. Pero esta indumentaria no es apta para todos los bolsillos. Además, la lista de añadidos es importante: camisa, chaleco, corbata, pañuelo para la solapa y calzado, por lo que el desembolso puede llegar hasta los 800 euros si se compra el lote completo de accesorios. Ésta es la razón por la que cada vez más personas, sobre todo jóvenes, se decantan por alquilar un chaqué o un vestido para acudir un acontecimiento social.
Reservar con antelación
Alquilar un chaqué o una prenda de etiqueta puede ser una buena alternativa para acudir a una ceremonia. El público que opta por alquilar un traje de estas características tiene una edad de 25 y 35 años y pertenece a la clase media o media-alta, aunque las tiendas que se dedican a este oficio tienen ropa para cualquier edad; desde jovencitos de 14 años hasta señores de 70. Incluso hay establecimientos que alquilan chaqués para niños, aunque la mayor demanda viene de la mano de novios y padrinos.
Desde las tiendas que alquilan chaqués se recomienda acudir con un mes de antelación a la fecha de la boda o del acontecimiento, ya que decantarse por hacer la reserva con tiempo ayuda al usuario a ‘bloquear’ las tallas y modelos que necesita y evitar sustos en el último momento. Si la decisión se toma con retraso y se acude al comercio durante la última semana, el cliente puede estar obligado a pagar recargo denominado «por urgencia», que supone un 20% del valor total.
Los negocios de alquiler de chaqués devuelven el importe íntegro del traje si se solicita con una semana de antelación al evento en el que iba a ser utilizado
También se puede dar el caso de que una vez que el cliente ya ha reservado y pagado su traje o chaqué, finalmente no lo necesite. Los negocios de alquiler de chaqués devuelven el importe íntegro del traje si se solicita con una semana de antelación al evento en el que iba a ser utilizado. En caso contrario, el cliente no percibirá ninguna devolución.
Habitualmente la contratación de la prenda se realiza por un período de fin de semana, de viernes a lunes. Sin embargo, las tiendas se suelen ajustan a las necesidades de cada cliente y del acto en concreto, por lo que se pueden encontrar algunos establecimientos en los que el período de alquiler se adelanta al jueves por la tarde si el acto social se desarrolla a lo largo de viernes.
Otro aspecto muy importante que se debe tener en cuenta es que el pago del traje de alquiler se suele realizar de manera íntegra en el momento de la reserva. Estas tiendas de alquiler no suelen solicitar al cliente una fianza o depósito, aunque sí recogen los datos personales y el DNI del interesado. Es su garantía para que les devuelvan el traje en las mismas condiciones en que se le prestó al cliente.
Accesorios y complementos
El alquiler del chaqué oscila entre los 65 y 90 euros, dependiendo del establecimiento. Un precio asequible para cualquier persona que quiera evitar tener que pagar el precio de una prenda para una sola puesta. Además la mayoría aplican descuentos para grupos de seis o más personas, por lo conviene valorar la idea de alquilar un chaqué en grupo.
En el alquiler del chaqué se suele incluir la levita, el pantalón, el chaleco, la corbata de la ceremonia y los tirantes, y en los esmóquines se incorporan el fajín y la pajarita. Por lo tanto, hay que tener en cuenta que el resto de complementos, como camisas o zapatos, no están incluidos en el acuerdo de alquiler. Por otro lado, también es posible alquilar únicamente accesorios; el precio por alquilar una pajarita ronda los 5 euros, mientras que comprarla supone 15; el fajín se acerca a los 10 euros, mientras que comprarlo cuesta 30.
El precio del alquiler incluye la limpieza y planchado del traje. El usuario debe devolver el traje en el momento que se haya fijado como día de entrega, habitualmente el lunes, porque la devolución con retraso se paga con una penalización de entre 3 y 5 euros por día, dependiendo de cada sitio. Si el retraso a la hora de entregar el traje se produce una semana después de la fecha acordada con el establecimiento, el cliente deberá pagar el precio de dos fines de semana, además de los recargos diarios. Por otra parte, también hay lugares que penalizan la necesidad de retirar el chaqué con anterioridad, antes de la fecha señalada como ‘día para recogerlo’.
Si se devuelve la prenda en malas condiciones, el cliente tiene la obligación de abonar de forma íntegra el arreglo
En caso de que el cliente devuelva la prenda en malas condiciones, deteriorada o estropeada, el cliente tiene la obligación de abonar de forma íntegra el arreglo. Si la prenda alquilada se extravía o se entrega rota se deberá abonar su importe total, que puede llegar a ser de 500 euros. Una vez entregado el traje usado, la tienda llevará la prenda a la tintorería, en ningún caso lo hará el cliente.
En cuanto a las tallas, la mayoría de las tiendas disponen de medidas para todo tipo de personas -desde la 44 hasta la 70-. Aunque es una opción que depende de cada tienda, en otras el tallaje llega sólo hasta la talla 66 y los esmoquines, media etiqueta o trajes de calle comprenden desde la talla 46 a la 62.
