Una rinoceronte negra alumbra en Kenia al primer ejemplar de esta especie en 25 años

Este mamífero se está recuperando tras el importante declive que sufrió entre 1970 y 1990
Por EROSKI Consumer 7 de febrero de 2005

Una rinoceronte negra ha dado a luz en el recientemente creado santuario de rinocerontes en el norte de Kenia a una hembra, la primera cría de esta especie que nace en el país en 25 años. La madre era una de los 20 rinocerontes negros procedentes del parque nacional del Lago Nakuru, en Nairobi, que llegaron en julio de este año a la nueva reserva.

«La expansión de los santuarios existentes o la creación de nuevos es uno de los métodos para incrementar el número de estos animales. Los recolocamos en nuevas áreas donde pueden multiplicarse y estar protegidos de los cazadores furtivos», asegura Anne Mugo, responsable del programa de Especies y Sabana del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) en África oriental.

Y es que el rinoceronte negro ha sufrido un gran declive en toda África en las últimas dos décadas, tanto en número como en extensión de sus dominios. Kenia, uno de los países más afectados, vio como su población de rinoceronte negro caía desde los 20.000 ejemplares en 1970 a menos de 400 a principios de los años 80. La razón habría que buscarla en un aumento del furtivismo debido a la demanda de cuerno de rinoceronte desde Oriente Medio y Asia oriental.

Estrategia de conservación

Como respuesta a esta dramática situación, el Gobierno de Kenia adoptó en 1993 una estrategia de conservación y un plan de manejo, en el que se daba prioridad a la creación de estos santuarios. El objetivo es incrementar la población del rinoceronte negro en sus hábitats naturales al menos un 5% cada año, para alcanzar en 2005 los 500 ejemplares y los mil en 2020. «El reciente nacimiento de la pequeña hembra de rinoceronte es un buen indicador de que la población de rinocerontes negros crecerá rápido en este nuevo santuario», añadió Mugo.

Los últimos datos de población en África revelan que se ha incrementado su número hasta superar los 3.600, lo que supone un aumento de 500 en los últimos dos años y sitúa a la especie en el camino de la recuperación. La población del rinoceronte negro en todo el continente africano sufrió un drástico declive desde los 65.000 que eran en 1970 hasta sólo 2.400 en los años 90. Por su parte, la población del rinoceronte blanco permanece estable aunque en números más altos. Hoy suman 11.000, cuando hace sólo un siglo eran 50.

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