Los excesos alimentarios continuos en los que se suele incurrir durante las fiestas de Navidad pueden provocar problemas de salud, afirma el doctor Jordi Salas-Salvadó, jefe clínico del departamento de Nutrición del Hospital Universitario Sant Joan de Reus, en Cataluña. Es por ello que aconseja evitar estos abusos alimenticios que a menudo propician el inicio posterior de dietas incorrectas con el fin de perder el peso ganado.
Salas señala que un exceso ocasional no hace daño, aunque «lo que sí acarrea daños para la salud son los excesos desmedidos y continuos». En su opinión, la Navidad se caracteriza por la «despreocupación» respecto a la dieta, ya que se come «mucho», lo que suele derivar en un aumento de peso.
En relación a las dietas posteriores, este experto nutricionista dice que pueden provocar problemas de salud como debilidad y disfunciones tanto gástricas, como neurológicas o psicológicas. Una preocupación desmedida incluso puede provocar trastornos alimentarios como la anorexia y bulimia, señala.
En este sentido, Salas recomienda que antes de empezar cualquier tipo de dieta hay que acudir al especialista para que oriente adecuadamente sobre la forma regular y equilibrada en la que se debe perder el peso. «Se debe comer de todo, alimentos muy variados, pero sin excesos», afirma.
Por último, insistió en que no debe alarmarse a los consumidores sobre los alimentos, porque podría provocar conductas obsesiva que son las que originan los trastornos alimentarios.
