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¿Por qué las pseudoterapias son un riesgo para la salud?
Las pseudoterapias, advierte el Ministerio de Sanidad, se presentan como soluciones aparentemente efectivas para mejorar la salud o curar enfermedades, pero carecen de evidencia científica que respalde su eficacia. Son el equivalente a ese consejo bienintencionado de un amigo o familiar: “Tómate unas gotitas de limón, ponte una bufanda blanca y duerme con un traje de frambuesa. Mañana estarás como nuevo”. Aunque pueda parecer una anécdota divertida, el problema es muy serio.
Estas terapias alternativas a menudo prometen soluciones rápidas y fáciles a problemas de salud complejos, jugando con las emociones y aprovechándose de la falta de conocimiento científico de los pacientes. Este engaño puede llevar a que las personas abandonen o retrasen tratamientos médicos validados, poniendo en peligro su salud.
Por eso, las autoridades sanitarias insisten en la necesidad de consultar siempre con profesionales de la salud acreditados y recurrir a fuentes de información fiables antes de optar por cualquier tratamiento o remedio.

Cómo identificar las pseudoterapias
En la web de la campaña #EsPopularPeroNoCiencia, el Ministerio de Sanidad ofrece una serie de claves para reconocer las pseudoterapias, al tiempo que las compara con las terapias reales:
❌ Pseudoterapia
- No está respaldada por estudios que incluyan suficientes personas.
- Utiliza testimonios de clientes como única evidencia.
- Quienes las administran no tienen la formación ni recursos necesarios para cuidar de los clientes.
- Las personas que la usan no tienen la información necesaria para prestar un consentimiento informado.
- Las personas que las utilizan son vulnerables a nivel médico y legal.
✅ Terapia real
- Se ha estudiado en un ensayo clínico con cientos o miles pacientes lo que permite identificar efectos secundarios.
- Se basa en estudios con casos y controles, que permiten demostrar los efectos del tratamiento.
- Los profesionales de la salud tienen toda la información necesaria para cuidar de los pacientes.
- Los pacientes cuentan con toda la información necesaria para decidir sobre su propio tratamiento.
- Además, los pacientes tienen acceso a todos los cuidados sanitarios y mecanismos legales para garantizar la protección de su salud.
Cómo detectar bulos de salud en redes sociales
En la actualidad, las redes sociales se han convertido en una fuente habitual de información, incluso en temas de salud. Sin embargo, no todo lo que circula en ellas es fiable. Los bulos pueden llevar a prácticas perjudiciales que pongan en riesgo nuestro bienestar.

Para evitar caer en esta desinformación, en la web ‘Salud con Evidencia’ dan estos consejos:
👉 Verifica la fuente
La información fiable proviene de instituciones de salud reconocidas, como la Organización Mundial de la Salud (OMS) o centros médicos respetados. Desconfía del contenido de sitios desconocidos, redes sociales o páginas sin respaldo profesional. Si no sabes cómo verificar la fuente, es más seguro no confiar en ella.
👉 Observa el lenguaje
Los bulos usan lenguaje alarmista y sensacionalista como «¡Cura milagrosa!» o «¡Lo que la industria farmacéutica no quiere que sepas!». La información médica fiable es precisa y evita exageraciones; por eso, a menudo, es más difícil de entender y requiere atención.
👉 Busca evidencia científica
Los tratamientos basados en evidencia están respaldados por estudios científicos rigurosos publicados en revistas reconocidas. Si un artículo menciona estudios, verifica que realmente existan. Si no sabes cómo comprobarlo, lo más prudente es desconfiar.
👉 Consulta con profesionales
Ante cualquier duda sobre un tratamiento encontrado en Internet, consulta a un profesional de la salud. Solo los especialistas pueden ofrecer orientación basada en la ciencia, ayudándote a discernir entre información veraz y falsa.
👉 Desconfía de las recomendaciones de ‘clientes’
La popularidad no equivale a la efectividad, por mucho que haya muchas personas que aseguran que a ellos les ha funcionado. Consulta siempre con expertos en salud sobre la eficacia de los tratamientos.
Salud con evidencia (y mucha ciencia)
Aunque la campaña #EsPopularPeroNoCiencia es novedosa, el Ministerio de Sanidad lleva años luchando contra las pseudoterapias. En 2018, lanzó el Plan para la Protección de la Salud frente a las Pseudoterapias, prohibiendo el uso de productos homeopáticos en consultas médicas, tanto en la sanidad pública como en la privada.
En 2021, Sanidad, en colaboración con el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, comenzó a publicar informes dentro del plan #coNprueba, evaluando la eficacia de diversas terapias. Hasta la fecha, se han publicado nueve estudios desarrollados por la Red Española de Agencias de Tecnologías Sanitarias y Prestaciones del SNS (RedETS), que pueden consultarse en la web conprueba.es