Desde que un paciente pide cita con el especialista en la sanidad pública hasta que recibe el diagnóstico, tras pasar la correspondiente prueba, transcurren de media cuatro meses, según un estudio realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) en 72 centros de atención especializada y consultas externas ubicados en 35 provincias.
Para la elaboración de este trabajo, OCU seleccionó diez especialidades médicas (oftalmología, neurología, alergología, dermatología, ginecología, urología, cardiología, traumatología, cirugía y otorrinolaringología) y siete pruebas diagnósticas (resonancia magnética, ecografía, TAC, mamografía, pruebas de alergia, endoscopia y radiografía). La conclusión es que «pasa demasiado tiempo» hasta que se diagnostica una enfermedad que puede ser grave.
Diferencias entre comunidades
Para la primera cita hay que esperar 57 días de media. Por comunidades, la situación más grave se da en Canarias, donde la espera media para ser atendido por el especialista es de 277 días. A continuación se sitúan Cantabria, con 100 días y el País Vasco, con 97. En el otro extremo se sitúan Cataluña con 37 días de espera, y la Comunidad Valenciana y Navarra, con 38.
Para las pruebas diagnósticas la espera total media es de 44 días, que oscila entre los 30 días para una radiografía y los 54 para una resonancia magnética. En este caso, los tiempos de espera por comunidades autónomas van desde los 18 días que aguardan los pacientes en el País Vasco hasta los 67 en Galicia. Las esperas son mayores cuando se trata de un alergólogo que solicita una prueba de alergia (134 días), o un neurólogo que manda una resonancia magnética (128 días).
Es habitual que a los pacientes se les facilite junto a la cita para una prueba diagnóstica una nueva cita con el especialista para establecer el diagnóstico y tratamiento si procede. Si al tiempo de espera de esa segunda cita con el especialista sumamos el tiempo esperado por el paciente para la primera cita, obtenemos el tiempo de espera total para el acto médico completo, que se fija en 121 días.
OCU recomienda a los ciudadanos que reclamen ante el Servicio de Atención al Paciente de su centro sanitario si temen que el tiempo de espera puede empeorar su salud
OCU señala que diez autonomías cuentan con una normativa que garantiza que el paciente sea atendido en unos plazos máximos, permitiéndole para ello acudir a cualquier centro sanitario a costa de la Administración. No obstante, también en los plazos máximos hay grandes diferencias. Así, mientras que en Castilla-La Mancha se puede hacer uso de este derecho a partir de los siete días de espera, en Baleares hay que aguardar dos meses.
Mejora la situación respecto a 2004
Pese a estos datos, la organización de consumidores afirma que la situación ha mejorado con relación a 2004. Esta mejora se percibe especialmente en las pruebas diagnósticas, donde se ha registrado una reducción de 19 días en el tiempo de espera de los pacientes.
No hay grandes cambios en cuanto a la información que facilitan las comunidades sobre las listas de espera en atención especializada, que sigue siendo «escasa». OCU dice que en muchos casos esta información «es inexistente» o cuando se publica, se hace «con indicadores incompletos y sin una regularidad preestablecida».
La organización ha remitido su estudio a los responsables de Sanidad de las autonomías y les ha solicitado que apliquen iniciativas eficaces para reducir las listas de espera no quirúrgicas. También les ha pedido un sistema de información sobre las listas de espera que sea público, transparente y comparable, y que los pacientes estén informados sobre las garantías legales que les asisten en caso de no cumplirse los plazos garantizados.
Para efectuar este análisis sobre la situación OCU ha entrevistado a 8.216 pacientes que durante el mes de julio de 2007 esperaban a ser atendidos por su especialista o para la realización de una prueba diagnostica.
–Que los médicos de atención primaria puedan prescribir ciertas pruebas diagnósticas que no requieran el paso previo por el especialista.
–Que se garanticen para todas las especialidades unos tiempos máximos de espera en las distintas etapas de la atención sanitaria.
–Que los ciudadanos reclamen ante el Servicio de Atención al Paciente de su centro sanitario si temen que el tiempo de espera puede empeorar su salud. En su página web se halla un modelo y algunos consejos para hacerlo.