¿Retención de líquidos? Adopta estos hábitos para evitar los edemas

Usar poca sal, aumentar la toma de alimentos con potasio y hacer ejercicio físico son algunas rutinas que debes practicar para no sufrir de piernas cansadas.
Por Eva Carnero 2 de agosto de 2019
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Imagen: stockasso

Detrás de la retención de líquidos (edemas) que produce en nuestro cuerpo hinchazón y pesadez en las piernas, hay muchas causas. Están los cambios hormales, la insuficiencia venosa crónica (varices), algunos medicamentos… y también la sal. Algunas puedes evitarlas. Apunta los siguientes consejos de alimentación y rutinas para no sufrir los síntomas de las piernas cansadas.

Huye del exceso de sal

Más del 70 % del sodio que ingerimos proviene del procesado y manufacturación de los alimentos, y solo el resto corresponde a la sal que se añade durante el cocinado o en la mesa.

¿Qué productos debería excluir de la dieta una persona con retención de líquidos? Según la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), estos son algunos de los alimentos que conviene evitar: anchoas en salazón (12,14 g de sal por cada 100 g), fuet (3,94 g), chorizo (3,58 g), salchichón (3,36 g), quesos, en especial el azul (3,14 g), kétchup (2,64 g), sopas y caldos (2,05 g), aperitivos salados (1,26 g), platos preparados (0,92 g) y repostería industrial (0,61 g).

También debería tener en cuenta que entre los alimentos bajos en sodio están verduras, hortalizas y frutas frescas, como las espinacas, la alcachofa, la remolacha, la zanahoria o el apio. También se encuentran las legumbres, como las lentejas, los garbanzos, las alubias o la soja. La carne, el pescado y el marisco fresco, sin procesar, también son bajos en sal. Así, podemos comer ternera, cordero, pollo, cerdo, merluza, rape, sardinas, almejas, lubina o pulpo hervido.

Toma potasio para compensar

Para mantener el equilibrio de líquidos y contrarrestar el nivel de sodio del organismo se recomienda consumir alimentos ricos en potasio. En esta categoría se hallan algunas frutas, como el albaricoque, el plátano, los kiwis, las ciruelas o el dátil, y verduras como el brócoli, la alcachofa, la acelga o la calabaza. Además, hay que añadir las cebollas, que ayudan a mejorar la circulación de la sangre.

Otras rutinas para evitar edemas

Además de la dieta, el estilo de vida es fundamental en lo que a la salud cardiovascular se refiere. Acompañar una alimentación adecuada con la práctica regular de ejercicio reducirá las posibilidades de hinchazón en las piernas.

  • 1. Mueve los músculos. Activar la musculatura de la parte afectada por el edema (en especial, las piernas) puede contribuir a bombear el exceso de líquido hacia el corazón. La natación, la bicicleta elíptica y la bici sin resistencia o los ejercicios de suelo, como la técnica de Pilates o la práctica de yoga, pueden resultar beneficiosos.
  • 2. Eleva la parte afectada manteniéndola por encima del corazón varias veces al día, incluso mientras duermes.
  • 3. Masajea la zona hinchada hacia el corazón mediante una presión firme, pero no dolorosa.
  • 4. Evita estar mucho tiempo de pie y utilizar tacones demasiado altos.
  • 5. Es recomendable no usar prendas apretadas en la cintura o calcetines con goma elástica. En su lugar, es preferible el empleo de medias elásticas de compresión progresiva, si el médico te las recomienda.
  • 6. Mantén la zona limpia, hidratada y sin lesiones. La piel seca y agrietada es más propensa a raspaduras, cortes e infecciones, que pueden agravar el problema.
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