La ministra de Sanidad y Consumo, Elena Salgado, afirmó ayer que «no existe desabastecimiento» de medicamentos en las farmacias debido a la entrada en vigor de los nuevos precios, si bien reconoció la existencia de problemas en el suministro de un total de nueve especialidades farmacéuticas, de las que ocho cuentan con sustitutivo y sólo una, el antiasmático «Theodur», es de difícil sustitución.
El resto de medicamentos son el antiinflamatorio «Feldene», el antibiótico ginecológico «Dalacin», el quimioterápico «Citarabina», el antiasmático «Pulmicort», el antihipertensivo «Beloken», el antidepresivo «Tepazepam», el tranquilizante «Loramet» y el ansiolítico «Orfidal».
Salgado aseguró que se trata de un hecho puntual debido a «problemas de fabricación». La existencia de estas complicaciones, que a su juicio han sido tal vez amplificadas por algunas comunidades, «no supone que haya desabastecimiento», insistió.
La diferencia consiste en que el desabastecimiento significaría que hay «problemas en origen», mientras que la falta de suministro «se refiere a las ocasiones en que un determinado medicamento no llega con la cadencia normal a determinada oficina de farmacia», concluyó la ministra.
