El jefe de cardiología del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, Luis Sánchez-Harguindey, afectado por un tumor cerebral, pidió ayer públicamente que le permitan tomar Bio-Bac, el producto ilegal retirado por el Ministerio de Sanidad, porque gracias a él, aseguró, se encuentra «de maravilla». Ex secretario de Estado de Sanidad y ex subsecretario del Ministerio de Interior en la época de UCD, el doctor es uno de los firmantes de la denuncia penal que medio centenar de personas han presentado contra el director de la Agencia Española del Medicamento por omisión de auxilio al retirar el producto.
Sánchez-Harguindey compareció ayer para explicar su caso y los beneficios que ha experimentado tras empezar a tomar Bio-Bac junto a la quimioterapia. Acompañado de su hijo, el especialista quiso destacar que no ha aparecido ningún caso al que dicho producto le haya hecho mal y reiteró que él se encuentra «muy bien».
Según explicó su hijo, a Sánchez-Harguindey se le diagnosticó un tumor cerebral hace año y medio y tras seguir el protocolo médico tradicional «experimentó un bajón imparable» en sus niveles de plaquetas y glóbulos rojos debido a la quimioterapia.
Dejó la silla de ruedas
«Pese a sus reticencias», añadió, comenzó a tomar productos naturales y «a través de un amigo» conoció el Bio-Bac, con el que «ha soportado la quimioterapia de maravilla» y ha podido dejar la silla de ruedas y reincorporarse a su trabajo en el Clínico.
Junto a él comparecieron otros pacientes que también reclamaron al Ministerio de Sanidad poder seguir tomando un medicamento que, según ese departamento, es «presumiblemente inocuo». La madre de un niño de siete años afectado de un tumor benigno en el tronco del cerebro imposible de extirpar en su totalidad aseguró que desde el primer día que el pequeño empezó a tomar Bio-Bac tiene «una calidad de vida sorprendente» y no ha vuelto a la cama de la que antes no se levantaba.
Esta madre explicó que el oncólogo que atiende a su hijo en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, cuando ella le informó de que el niño iba a tomar Bio-Bac, le dijo que «ante un caso desahuciado podía hacer lo que quisiera» y que ahora le ha asegurado que si en las próximas pruebas se aprecia que el tumor se ha reducido «va a dar la cara». «No digo que cure, pero si el producto es inocuo y le da calidad de vida, quiero que me lo dejen comprar», pidió la madre del niño.
Pastor defiende la retirada
Por su parte, la ministra de Sanidad y Consumo, Ana Pastor, defendió ayer la decisión de la Agencia del Medicamento de retirar el producto Bio-Bac por su condición de ilegal, al no reunir las características que requiere la Administración para la autorización de fármacos.
«Las autoridades sanitarias y la agencia española del medicamento velan por que los medicamentos sean seguros, eficaces y de calidad», destacó la ministra en referencia a la denuncia presentada contra el director de la Agencia, Fernando García Alonso, por usuarios de Bio-Bac.
Mientras tanto, la jueza de San Lorenzo del Escorial, responsable del caso Bio-Bac, dictó ayer auto de libertad provisional bajo fianza de 6.000 euros para Rafael Chacón, la única persona implicada que ingresó en prisión, según informó la abogada de la defensa, María Teresa Martín García.
