Científicos del Instituto de Agricultura Sostenible (IAS) han logrado eliminar los péptidos tóxicos presentes en el gluten de trigo mediante técnicas biotecnológicas, sin alterar las características organolépticas y las propiedades nutritivas de este cereal. Los investigadores trabajan desde hace años en el desarrollo de nuevas variedades de trigo con muy baja toxicidad para que sean aptas para personas celíacas.
El proyecto, dirigido por el doctor Francisco Barro, busca nuevas variedades de trigo libres de gliadinas, que junto con las gluteninas son los componentes mayoritarios del gluten de trigo. El IAAS explicó que estudios previos habían demostrado que determinados grupos de gliadinas (sobre todo, alfa y gamma gliadinas) jugaban un rol importante en la respuesta alérgica por parte del paciente celíaco. Por ello, «los esfuerzos del equipo de investigación se centraron en el silenciamiento, mediante métodos biotecnológicos (ARN de interferencia), de los genes que codifican las gliadinas tóxicas capaces de desencadenar esta enfermedad», indicaron. Según esta hipótesis, «la inhibición de los genes que sintetizan dichas proteínas se traducirá en una reducción considerable del potencial tóxico del cereal».
El Instituto de Agricultura Sostenible destacó que las nuevas variedades de trigo se han analizado por los métodos estándares del Codex Alimentarius para cuantificar el contenido de gluten en alimentos. Los análisis realizados a las harinas de estos cereales mostraron una reducción de un 95% en el contenido de gliadinas tóxicas. Además, los posteriores análisis inmunológicos con linfocitos T, que reconocen las proteínas tóxicas, extraídos de pacientes con enfermedad celíaca mostraron que las nuevas variedades de trigo fueron incapaces de activar la respuesta inmune.
En cuanto a los análisis preliminares de calidad para determinar del comportamiento panadero de las nuevas variedades de trigo, de cara a su posterior comercialización y uso, mostraron, según señaló el IAS, que las harinas modificadas conservan gran parte de sus propiedades tecnológicas. Por tanto, las harinas producidas a partir de estas variedades se podrían emplear para la producción de alimentos aptos para celíacos. El estudio del grupo de Biotecnología Vegetal del IAS se ha publicado en la revista científica PNAS (Proceedings of the National Academy of Sciences of the United States of America).