Cada ciudadano en España compra entre ocho y nueve kilos de ropa al año. Pero también derrocha mucho: cerca de 390.000 toneladas de prendas y otros textiles terminan en el cubo de la basura, según la Asociación Española de Recuperadores de Economía Social y Solidaria. La moda sostenible intenta frenar este consumo frenético para proteger al planeta y sus habitantes. El reto es hacer un armario más solidario. Pero ¿por dónde empezar? Beatriz Valdivia, creadora de Moda en Positivo, una plataforma que fomenta proyectos de ropa responsable en todo el mundo, explica qué es la moda solidaria en diez claves y da consejos para vestir y que sea de forma más amable con las personas que la hacen y también con el planeta.
1. Ropa sostenible: donde las personas importan
«Para vestir de forma más solidaria y sostenible, lo primero es practicar un consumo de prendas más responsable: adquiera solo las que necesite y opte por aquellas locales que usen tejidos ecológicos»La moda sostenible es aquella que tiene en cuenta los tres pilares en los que se basa la llamada responsabilidad social empresarial: el respeto por las personas que trabajan, la protección del medio ambiente y, además, es económicamente sostenible. En la moda solidaria el respeto a las personas es una parte esencial: los trabajadores deben tener unas condiciones dignas de empleo y crear una marca que favorezca la economía y producción local, así como la recuperación de empleos.
La moda sostenible incluye, por tanto, la ropa ecológica, creada a partir de materias primas y métodos que respetan el planeta. Pero también incorpora una vertiente de prendas con reciclaje de otras materias (llamada upcycling) y ropas artesanales, vintage o la llamada moda inteligente, donde el cuidado de los trabajadores del sector es esencial.
2. Ropa que cuida el planeta
La moda sostenible usa materias primas producidas por medios ecológicos; entre ellas, fibras cultivadas sin pesticidas ni herbicidas, como el algodón orgánico o el cáñamo. Pero hay muchos más tejidos sostenibles. Existe ropa creada a partir de la celulosa de los árboles e incluso hay un gran aumento de materiales sustitutivos del cuero, como los llamados cueros vegetales realizados a partir de la piña o las setas.
Pero además de las materias primas, la moda sostenible ecológica también tiene en cuenta los procesos de producción para reducir el consumo del agua y la contaminación con el uso de tintes naturales. También se preocupa por reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2) en las áreas de distribución y comercialización.
Lo importante es que todos estos materiales ecológicos estén certificados, ofreciendo al consumidor una garantía de que su producción es amable con el planeta y con sus trabajadores y que protejan el medio ambiente silvestre y humano.
3. Ropa que reduce basura
«La moda solidaria también debe ser económicamente sostenible: es importante que fomente la economía local y sea transparente»
La ropa solidaria tiene una vertiente llamada de reciclaje, o upcycling, un concepto basado en prendas creadas a través del reciclaje de materiales que de otro modo acabarían en la basura.
La moda solidaria da un valor añadido a los residuos. Crea bolsos a partir de neumáticos o de anillas de las latas de refrescos o ropa a partir de otras prendas que iban a ser desechadas. Incluso usa plásticos y antiguas redes de pesca.
4. Moda que protege la cultura
La ropa solidaria también tiene en consideración el valor de la artesanía y el papel cultural de sus trabajadores manuales: tiene muy en cuenta la recuperación de técnicas ancestrales que de otro modo se perderían y el valor de las cosas hechas por artesanos. En otras ocasiones, la moda solidaria se vuelve más vintage y recupera piezas antiguas.
5. Pantalones más democráticos
«Disfrutar de un armario más sostenible y ahorrar es posible: reduzca su número de camisetas, escoja solo prendas solidarias de calidad y opte por ropa versátil»
La venta de prendas de segunda mano, incluso el intercambio de ropa entre particulares, también es parte de la moda solidaria, ya que protege la economía local. Aquel que lo necesita puede vender parte de su ropa, un amortiguador económico que fomenta un tipo de economía más horizontal y solidaria.
Además, es una opción más barata para el consumidor. La moda sostenible también debe ser económicamente sostenible: es importante que fomente la economía local y sea transparente.
6. Cuando la ropa es inteligente
La moda solidaria no se queda detrás en las tendencias. Así, también abraza la llamada smart fashion o moda inteligente. Las prendas solidarias inteligentes incorporan la idea del bien común con ayuda de la tecnología.
En este sentido, existe la ropa antimosquitos, con fibras que evitan las picaduras de los mosquitos -que tantas enfermedades peligrosas puede transmitir, como el zika o el dengue-, antimanchas o que favorecen la circulación sanguínea.
7. Un armario responsable
Para vestir de forma más sostenible, lo primero que hay que hacer es practicar un consumo de prendas más responsable: adquiriera solo la ropa que necesite. Además, para lograr un armario más sostenible, hay que optar por prendas que usen tejidos ecológicos, marcas locales. ¿Otro consejo? Compre piezas de ropa que sirvan de fondo de armario y que pueda combinar más veces.
8. La ropa eco no pasa de moda
La moda sostenible es una moda atemporal que nunca pasa de moda. Se debe adaptar la moda al estilo de la persona: es esencial comprar piezas de calidad porque eso influye en la durabilidad. Y esto es una característica de la moda solidaria.
9. Un armario solidario, y barato
Disfrutar de un armario más sostenible y ahorrar en el camino es posible. Lo primero, haga un análisis de su armario y quédese solo con lo que vale.
¿Y qué hacer con lo que no? Hay dos opciones. La primera, cambiar esas piezas por otras prendas entre amigos, conocidos o en tiendas de segunda mano. Y la segunda opción para vestir de forma solidaria y ahorrar es customizar o modificar la ropa. A veces una prenda nos gusta mucho pero ya no nos queda bien o tiene una parte muy gastada. ¡Entonces podemos a partir de alguna de sus piezas reconvertirla en otra! Estas son acciones que hacen ahorrar mucho en el vestuario.
10. Comprar (y vestir) solidaridad
Eso no quiere decir que la moda solidaria implique no adquirir prendas nuevas. Al contrario. Significa apostar por un consumo de moda más racional. Se pueden comprar piezas que sean multifuncionales, es decir, que puestas de distintas formas tienen diseños diferentes, lo que casi conlleva tener varias prendas en una sola.
Otro consejo para vestir de forma más solidaria y racional es adquirir ropa que sirve de fondo de armario y que, al combinarla, permita tener diferentes looks.
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