Los países de la Unión Europea (UE) recibieron en los nueve primeros meses de 2010 una cifra de inmigrantes clandestinos menor que en el mismo periodo del año anterior, excepto en el caso de la frontera entre Grecia y Turquía, donde el número fue cinco veces mayor. Así se recoge en un informe publicado por Frontex, la Agencia Europea para la Gestión de la Cooperación Operativa en las Fronteras Exteriores de los Estados miembros de la Unión Europea (UE).
El número de inmigrantes indocumentados que llegó a Canarias durante ese periodo disminuyó un 99%, mientras que en Italia la reducción fue de dos tercios. Ello se debe al efecto combinado de la crisis económica que atraviesan los países europeos y los acuerdos de repatriación firmados con países africanos, explicaron desde Frontex. Sin embargo, el número de inmigrantes «sin papeles» que cruzaron la frontera terrestre entre Grecia y Turquía se incrementó un 369%, hasta llegar a 31.000 en los primeros nueve meses de 2010, según los datos de Frontex. La llegada de inmigrantes indocumentados a las islas griegas y a la frontera con Albania experimentó una importante reducción, por lo que la cifra total de llegadas en toda Grecia en esos meses fue similar a la del año anterior.
La frontera entre Grecia y Turquía es para muchos inmigrantes un lugar seguro y barato por donde entrar en el territorio de la UE y es mejor que cruzar el Mediterráneo, explicó en Atenas el subdirector ejecutivo de Frontex, Gil Arias-Fernández. Nueve de cada 10 inmigrantes clandestinos utilizan Grecia como trampolín para entrar en otros Estados miembros, apuntó al respecto.
«El principal problema a la hora de hacer frente a este flujo de inmigración ilegal en Grecia es, en parte, la escasa cooperación por parte de Turquía?, aseguró. Las autoridades griegas se quejan de que Ankara no se esfuerza lo suficiente para impedir que entren personas de forma ilegal en Grecia y afirman que la negativa de Turquía a aceptar a los inmigrantes que han cruzado la frontera desde su territorio anima a los migrantes potenciales a elegir esa ruta, señaló el representante de Frontex.
Arias-Fernández aludió a un descenso en el número de inmigrantes indocumentados que han cruzado esa frontera durante el mes de noviembre, después del comienzo de una misión fronteriza de la UE, pero aclaró que aún es pronto para saber qué efecto tendrá esta operación, de dos meses de duración.
